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En un mensaje final, el Grupo Interdisciplinario de Especialistas Independientes destacó que las investigaciones del caso Ayotzinapa no se cierra porque “no siga el GIEI”.
Los y las integrantes del GIEI recordaron que el Estado mexicano y sus instituciones tienen la obligación de investigar, hacer justicia y buscar a las personas desaparecidas.
En un comunicado, rechazaron que su trabajo haya estado influenciado por cuestiones políticas o por opiniones personales sobre caso.
En su mensaje de despedida, Carlos Martín Beristaín y Ángela María Buitrago Ruiz destacaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador haya ordenado abrir los archivos y dar acceso a pruebas documentales de las Secretarías de la Defensa Nacional y de Marina, así como del CISEN.
A pesar de que la información que recibieron fue parcial, corrobora la existencia de datos sobre el momento de los hechos y fechas posteriores a la detención y traslado de los normalistas.
Sin embargo, cuestionaron que las instituciones hayan negado la entrega de estos documentos, pese a las pruebas existentes, y que se debe avanzar.
En el documento, recordaron que la indagatoria no estuvo exenta de presiones para no judicializar o realizar acciones inmediatas contra determinadas personas.
No obstante, se logró la detención de un exprocurador, dos generales, 20 miembros del ejército, así como más de 100 miembros del crimen organizado y fuerzas de seguridad o funcionarios del estado.
El GIEI indicó que una parte importante de las acusaciones son por delincuencia organizada, y no por la desaparición forzada y ataque a los normalistas. Pero, los seis informes que dejan sobre el caso son una base para los avances actuales porque incluyen análisis de los hechos, recomendaciones para el caso y para las políticas de atención a las víctimas, investigación criminal, uso de pruebas, judicialización y otras.
También el Grupo Interdisciplinario de Especialistas Independientes agregó que el punto principal del trabajo del GIEI han sido las víctimas y familiares.
