La diputada panista consideró que la simulación de paridad es más sofisticada ahora, sobre todo en el contexto indígena
MANUEL MONROY
«Alcaldesas, principalmente de la zona indígena de Chiapas, son presionadas y viven violencia política de género, por lo que no ejercen sus cargos dejando esta tarea a los hombres», aseguró la Diputada local panista, Janette Ovando Reazola.
Recordó que días atrás el Senado de la República aprobó un dictamen de paridad para todos los ámbitos de gobierno. «En este marco en Chiapas trabajamos para lograr la igualdad sustantiva en todos los temas de género», dijo.
Calificó como positivo que el Congreso de Chiapas haya citado a las alcaldesas de la zona referida con el objetivo de escuchar de viva voz las problemáticas que viven en sus municipios, sobre todo las relacionadas a violencia política de género», señaló.
La idea -subrayó la legisladora- es respaldar a estas mujeres, pues sabemos que en su ámbito de trabajo encuentran muchos obstáculos, es decir, no cuentan con las condiciones que viven los hombres. «La simulación de paridad es más sofisticada ahora, sobre todo en el contexto indígena».
En este tenor, la legisladora afirmó que ningún derecho humano de la mujer puede estar subyugado a un derecho indígena. «El Congreso respeta las garantías de los pueblos originarios y prueba de ello es el trabajo que se hizo en Oxchuc, donde nunca se violaron los derechos de las mujeres».
Cuestionada sobre cómo es que sabiendo que las alcaldesas dejan sus cargos para que sus maridos gobiernen y no se actúa, Ovando Reazola destacó que es un tema difícil. «No podemos obligar a nadie a que se empodere si no toma la decisión», afirmó.
A título personal la panista consideró que cuando las mujeres irrumpen de una forma tan abrupta en la política, como en el proceso electoral de 2018, el ambiente se pone tenso y de manera general se registra más violencia contra éstas
