Inicio Destacadas Tras prohibición, vapeadores siguen en mercado negro; 1.7 millones de mexicanos consumen

Tras prohibición, vapeadores siguen en mercado negro; 1.7 millones de mexicanos consumen

59

Excelsior

A más de un año de la prohibición, los vapeadores no se han esfumado. Sitios como restaurantes, bares o afuera de las escuelas, permanecen cubiertos por una nube que no se ha logrado dispersar.

Los vapeadores, también conocidos como vapes, e-cigarrillos o cigarros electrónicos son dispositivos que producen vapor a través de una resistencia que, alimentada por una batería, calienta el líquido contenido dentro del producto hasta llevarlo al punto de ebullición. El líquido puede contener nicotina y otras sustancias adictivas.

De múltiples colores y diseños, los vapes tomaron relevancia en años recientes debido a su practicidad y facilidad de uso.

SURGIMIENTO
En 1963, el estadunidense Herbert Gilbert presentó el primer cigarrillo electrónico que pretendía disminuir el consumo de tabaco, sin embargo, no tuvo gran aceptación, pues en aquel entonces fumar no era considerado un riesgo para la salud.

Casi 40 años después, la idea del vaporizador fue retomada por Hon Lik, farmacéutico chino que introdujo el cigarrillo electrónico moderno en 2003.

Países de Europa fueron los primeros en abrir paso al uso del cigarro electrónico, en 2007 los vapeadores ya se habían extendido a Estados Unidos y en poco tiempo estarían presentes alrededor del mundo.

En México, el boom de los vapeadores fue previo a la pandemia por covid-19, sin embargo, en 2022 su uso fue prohibido. En junio del año pasado, el Gobierno de México firmó un decreto con el que se prohibió la circulación y comercialización de los vapeadores.

PROHIBICIÓN POR RIESGOS A LA SALUD
Cifras oficiales de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), estiman que al menos cinco millones de mexicanos entre los 12 y los 65 años han utilizado un vaper.

El Decreto emitido en 2022 prohibió la comercialización de vapeadores y cigarros electrónicos bajo el argumento de que son más dañinos que los cigarros convencionales, y que además pueden causar desde diarrea y vómito hasta enfisema, bronquitis, asma, infartos cerebrales y cardíacos, y daños al sistema nervioso o respiratorio.

A través de la Cofepris, científicos y médicos del Laboratorio Nacional de Referencia diseñaron un estudio para conocer el contenido de los vapeadores; los resultados arrojaron más de 30 sustancias no reportadas en los empaques.

Entre los compuestos que causaron alarma entre las autoridades sanitarias estaba el linalool, una sustancia contenida en insecticidas; alcohol bencílico el cual solo está permitido para utilizarse en perfumes, cremas y algunos cosméticos; isoamilo, un compuesto localizado en el aguijón de las abejas, lo que causa la adicción al producto que lo contiene.

De acuerdo con el sector salud, en México se estima que el 45% de los adolescentes conocen los vapeadores y 1.7 millones de personas los consumen; en apego a los estudios, el uso del vape podría desencadenar adicciones a temprana edad.

“Sabemos que esa es una sustancia que crea adicción, porque es un estimulante para la persona, además de que tenemos el conocimiento de que, si los niños empiezan a vapear, si los niños empiezan, niños, adolescentes o jóvenes también conviven en un ambiente en el que el siguiente paso es el cigarrillo tradicional”, señaló para Grupo Imagen Isaac Macip, Vocero de COFEPRIS.

Ante prohibición, surge mercado negro. MC propone regulación.

Pese a la prohibición de la comercialización de los cigarros electrónicos, aún hay sitios donde se pueden encontrar. Grupo Imagen pudo corroborar que en la zona centro de la Ciudad de México hay comercios establecidos formalmente que tienen a la venta vapeadores desde los 400 hasta mil 200 pesos o más, depende la marca, el uso o los artículos que incluyan.

Algunos negocios incluso tienen su página web donde exhiben sus productos para comercializarlos en línea. En algunas plazas comerciales aún permanecen máquinas expendedoras de vapes, aunque ya no se encuentran en funcionamiento exhiben variedad de cigarros electrónicos.

El barrio chino es otro de los sitios que exhiben abiertamente los vapeadores, a pie de calle y al alcance de cualquier persona, vapeadores desechables de diferentes colores y sabores se ofertan en menos de 100 pesos. Debido a la falta de regulación, surge el mercado negro.

“El mercado negro no cumple con las cosas que estamos diciendo, no te informan porque no pasan por una autoridad sanitaria, no le puedes prohibir a niños como hoy está pasando, lo puedes pedir hasta por aplicación, te lo venden en la calle, es decir, si nos queremos engañar entonces digamos que está prohibido, pero está en todas partes”, mencionó Salomón Chertorivski.

En marzo de 2023, el grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano presentó una iniciativa a cargo del Diputado Sergio Barrera Sepúlveda, que plantea la regulación de los vapeadores, bajo el argumento de que existe un mercado negro que aumenta el riesgo a la salud de los consumidores.

“Están en las calles, están en cualquier escuela, fuera de las escuelas, se pueden comprar a través de plataformas electrónicas, los vemos con muchísimos ambulantes afuera de los restaurantes, entonces qué es lo que nosotros decimos, hay que regular”, expresó para Grupo Imagen Sergio Barrera, Diputado Federal por Movimiento Ciudadano.

“Si no hay regulación y simplemente dices está prohibido entonces lo que surge y ya lo sabemos históricamente es el mercado negro”, dijo Salomón Chertorivski.

La iniciativa de reforma a la Ley de Salud y Ley General para el control de tabaco propuesta por Movimiento Ciudadano, plantea la regulación de los vapeadores bajo el esquema de tres ejes fundamentales: la salud de la población, el respeto al derecho humano del libre desarrollo de la personalidad de los usuarios de dispositivos y certeza en el mercado.

Por su parte, Isaac Macip, vocero de la Cofepris señaló tener conocimiento de la comercialización de vapeadores en establecimientos físicos, así como en redes sociales y páginas web. Agregó que en coordinación con las Comisiones Estatales se ha logrado decomisar más de 150 mil vapeadores a nivel nacional.

¿La prohibición los esfumó?
La distribución de los vapeadores se expandió como una nube de humo. La Encuesta Nacional del Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat) expuso que en 2016 existían alrededor de 975 mil usuarios, para 2021 se preveía un aumento de más de 100 mil consumidores, es decir, se esperaba tener un millón 400 mil 617 usuarios de vapes.

A partir del decreto de prohibición de la comercialización de los cigarros electrónicos, el Gobierno Federal inició campañas que advierten sobre el uso de estos dispositivos.

A la par, movimientos como “Por un mundo sin humo”, financiados por empresas comercializadoras de productos del tabaco buscan abrir paso a diferentes percepciones sobre alternativas de consumo, bajo el lema: “sin humo, por favor”.

Por su parte, en el mes de abril la Cofepris llevó a cabo el primer Denunciatón Nacional Contra el Vapeo, que pretendía recabar hasta 500 denuncias sobre la venta ilegal de vapeadores o cigarros electrónicos.

Ante el éxito del programa, la dependencia continúa recibiendo denuncias. Para realizarla se debe proporcionar la ubicación exacta del punto de venta a través de la página web de Cofepris, los datos del denunciante serán información confidencial. Otra forma de realizar la denuncia es a través del centro de atención telefónica 800 53 5050, o bien, por redes sociales.

A casi un año de la prohibición, los vapeadores no se han esfumado. Sitios como restaurantes, bares o fuera de las escuelas, permanecen cubiertos por una nube que no se ha logrado dispersar.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí