La legisladora morenista también aseguró que la Corte «sirve de refugio para los mercenarios del neoliberalismo»
Tras calificar como acto vergonzoso por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el resolver la acción de inconstitucionalidad 29/2023 (Plan B), Flor de María Esponda Torres, del partido Morena, aseguró que no sorprendió el fallo, pues «la Corte está al servicio del poder económico».
Dijo que la división de Poderes busca el equilibrio y la armonía de las fuerzas mediante pesos y contrapesos, sin embargo, cuando uno de estos Poderes sobrepasa sus facultades constitucionales, vulnera y restringe la autonomía de otros.
Recordó que nueve de 12 ministros votaron por la nulidad del Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley General de Comunicación Social y de la Ley General de Responsabilidades Administrativas.
«Con esta decisión las y los ministros no fueron conscientes del respeto al proceso legislativo que determina la calidad de la democracia de un país», dijo y agregó que solo al leer las versiones estenográficas de las Cámaras de Diputados y Senadores se puede afirmar que no fue afectado el principio de deliberación democrática.
Subrayó que la resolución de la SCJN atenta contra la confianza de las y los mexicanos con las instituciones, ya que es visto como la protección de los intereses particulares sobre los del pueblo y añadió que ese espacio judicial «sirve de refugio para los mercenarios del neoliberalismo».
Esponda Torres afirmó que los ministros afirman defender la democracia, pero en realidad juegan con la justicia y hacen del Derecho y la Constitución «letra muerta» y enfatizó. «No quiero pensar que esto sea una postura con la finalidad de manejar y maniatar al Poder Legislativo».
Lamentó que la oposición y sus voceros corporativistas celebraran la resolución como una victoria, no solo contra el Presidente de México, sino también contra el pueblo. «Infinidad de veces se nos ha denostado con señalamientos ridículos, ya que les gusta asegurar que en Morena hay signos dictatoriales».
