Un apasionado jugador de peleas de gallos resultó el alcalde Arriaga, José Alfredo Toledo Blas, hecho que no tuviera relevancia si no fuera porque el descuido que tiene para con su pueblo como gobernante, fuera catalogado como desastroso.
El edil, según documenta el periodista Escayola, tiene problemas de ludopatía, enfermedad que se caracteriza por la inclinación patológica por los juegos de azar.
La fama del edil de este municipio como jugador de las peleas de gallos está en todos los hogares de Arriaga y sus fronteras, tanto que ha ganado torneos de Derbi que se realizan en Boca del Cielo y en el municipio de Pijijiapan.
Además, para el alcalde, quien por cierto tiene en las ruinas la prestación de servicios como alcaldía, su presunción de ser un ganador nato, se debe a que posee más de mil gallos en propiedades que tiene diseminadas en la Costa Chica de Chiapas, según él mismo lo vocifera.
José Alfredo Toledo Blas alardea ganar más de 46 mil pesos mensuales en dicho juego de azar.
El grueso de la población rumora que el alcalde podría tener graves problemas de ludopatía. A su pueblo que le dio el voto y la confianza, lo atiende cuando quiere y cuando puede.
El torneo de Derbi de Gallos en Boca del Cielo se realizó en las instalaciones del tío Quique (El Diamante).
La bolsa que se llevó el afamado Presidente Municipal fue por la cantidad de medio millón de pesos.
Por lo bien que le va, ahora se entiende, dice el grueso de la población, el porqué se le salió de las manos la pandemia del coronavirus.
Las andadas del alcalde las apoya y comparte con el subsecretario de Pesca, Alejandro Fernández, quien también es un aficionado a este tipo de actividades.
Hace cuatro meses, aproximadamente, en el municipio de Pijijiapan, ambos, tanto el presidente municipal como el funcionario de Pesca, ganaron el primer lugar en el Derby de Gallos que se celebra anualmente, llevándose un millón de pesos.
En tanto Arriaga, ¡Bien, gracias!
