MISAEL AUTE
En el marco del Día Mundial para la Prevención del Abuso de Niños y Niñas, la diputada local Flor de María Guirao, recordó que según cifras del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), seis millones de menores son víctimas de agresiones y 80 mil de ellos mueren debido a esta violencia.
Tras señalar que este sector es de lo más vulnerables en la sociedad, recordó que pese a que la legislación y otras leyes generales en la entidad tipifican y castigan estos abusos, la problemática no se ha podido detener y peor aún “con pocas probabilidades de ser denunciados”.
Sobre esta situación, reveló que se ha descubierto que en la mayoría de los casos no hay expedientes abiertos, pues los abusos son cometidos por los familiares o personas allegadas a los niños. “Vemos con tristeza que muchos menores viven este viacrucis por abusos de los propios progenitores”, dijo.
Detalló que la violencia van desde agresiones verbales, pasando por explotación laboral, hasta violaciones sexuales. “Por todo esto re requiere adoptar las medidas necesarias para castigar las conductas intencionales vinculadas a la violencia de niñas, niños y adolescentes”.
Durante su reflexión, la legisladora priísta señaló que la situación no sólo afecta a los infantes, sino a la sociedad en general. “Los menores deben gozar de sus derechos universales tales como el de recibir educación, recreación, salud, inclusión, seguridad, pero son mancillados”.
María Guirao felicitó a organizaciones de la sociedad civil que se han sumado a la causa de buscar velar por el mejor interés de los niños. “Un caso en Chiapas lo tenemos en la Fundación Granito de Arena que trabaja en la prevención de abuso sexual infantil y que trabaja en conjunto con la Fiscalía”.
