Óscar Sántiz / Corresponsal
1 de diciembre de 2004 se crea la universidad; en el 2005 inicia con 4 Licenciaturas Turismo Alternativo, Lengua y Cultura, Comunicación Intercultural y Desarrollo Sustentable
San Cristóbal de Las Casas.- Con actividades culturales y encuentro deportivo, estudiantes, docentes, personal administrativo y directivos de la Universidad Intercultural de Chiapas (UNICH) celebraron el 19 aniversario de creación el pasado 1 de diciembre, a la que se unieron las Unidades Académicas de Oxchuc, Yajalón, Las Margaritas y Salto Agua.
«Recordar que en 1974 el Congreso Indígena en Chiapas, fue una actividad y evento Intercultural, la primera convivencia quizá de los pueblos indígenas de Chiapas y poder poner a la mesa sus necesidades, sus demandas y las situaciones en que viven en cada uno de los rincones de Chiapas, es el inicio y origen que marca la lucha por el reconocimiento de los derechos, en ese congreso indígena se demandaba el derecho a la Educación, a una educación diferente que en aquel tiempo marcaba en estado, diferente lo que consideraban en el plan curricular», dijo el rector de esta casa de estudios, Dionicio Toledo Hernández.
Durante su mensaje de bienvenida que dio a los estudiantes, recordó cómo en ese congreso, también se demandaban mejores condiciones de Salud, así como el derecho por la Tierra, a la comercialización, a la lengua y reconocimiento de los pueblos indígenas.
Hizo remembranza que fue de ahí, que nave una lucha y creación de la UNICH, «el 1 de diciembre de 2004 se crea nuestra universidad, en el 2005 inicia con 4 Licenciaturas Turismo Alternativo, Lengua y Cultura, Comunicación Intercultural y Desarrollo Sustentable, ahora hemos crecido, tenemos sedes».
Toledo Hernández recordó las palabras del primer Rector de la UNICH, Fábregas Puig, quién indicaba que está universidad no fue creada por cuestiones políticas, sino una respuesta a una demanda creciente de tener educación Intercultural en Chiapas , que tome en cuenta la variedad cultural del Estado, «y es justo lo que debe seguir viviendo y permanecido en nuestra universidad».
“Me sumo a la formación porque nunca se termina de aprender y nunca se termina de construir, tenemos que seguir en ese mismo camino en el que, el que hacer de la universidad, pueda formar a ciudadanos más informados, participativos y críticos y se logre efectos multiplicadores hacia el desarrollo social y económico de la comunidad, que construyamos un estado diferente, próspero e influyente, seamos una universidad promotora de importantes cambios en la conservación de la lengua, tradiciones, costumbres, pero en la incorporación de nuevos elementos que nos fortalezcan ”, concluyó.