El Economista
El sur del país registró el mayor crecimiento regional en los primeros tres meses del 2024, de 0.5% respecto al cuarto trimestre del 2023, mientras que en el resto de las regiones se observó un debilitamiento, de acuerdo con el Reporte sobre las Economías Regionales del Banco de México (Banxico).
La actividad económica mide el comportamiento de los sectores de manufactura, minería, construcción, comercio, turismo y agropecuario, en las entidades del país agrupadas en cuatro regiones.
Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán, que componen la región sur, tuvieron un buen desempeño en la manufactura, el turismo y la construcción; esta última con 4.3% de crecimiento, en tanto, en el resto del país se contrajo.
Esto se explica por el impulso de obras públicas como el Tren Maya; obras de mantenimiento al puerto de Veracruz; desarrollo de infraestructura urbana en Yucatán, y un estímulo sobre la construcción de parques industriales alineados con el proyecto de desarrollo del Corredor Interoceánico, según empresarios consultados por Banxico para este informe.
En la vertiente privada, resaltaron, hay más demanda de vivienda media y residencial en Quintana Roo, destino que ha captado un mayor número de residentes extranjeros que también impulsan la vivienda residencial turística.
Adicionalmente, destacaron un aumento en el flujo de créditos para adquisición de Infonavit y Fovissste, principalmente en Chiapas. Y un interés en la inversión en espacios de almacenamiento y logística por parte de empresas de exportación e importación de mercancías.
Sobreoferta en centro norte
Si bien la actividad económica de la región centro norte también creció, sólo fue de 0.1%; esta incluye Aguascalientes, Baja California Sur, Colima, Durango, Jalisco, Michoacán, Nayarit, San Luis Potosí, Sinaloa y Zacatecas.
En contraste, la caída más acentuada para la construcción fue en esta región con 12.7%, que se explica por una sobreoferta en el mercado de vivienda residencial turística y la baja de la demanda está directamente relacionada con la apreciación acumulada del peso contra el dólar, que afectó el poder adquisitivo de los extranjeros.
Los empresarios también reportaron una menor inversión en el sector energético ante la dificultad para obtener permisos para nuevas estaciones de despacho de combustibles.
De todas las actividades económicas, el centro norte tuvo un destacado avance en la minería con 5.8%, por encima de las demás regiones; directivos consultados explicaron una mayor disponibilidad, a precios menores, de insumos provenientes de China; la creciente demanda de yeso por parte del sector de la construcción, y nuevos servicios de consultoría y capacitación necesarios para estar en sintonía con las reformas a la Ley Minera.
Manufactura se estanca
En cuanto la manufactura, sólo se dieron alzas en centro norte, de 0.1%, y sur, de 1.8%; Veracruz y Oaxaca dieron un impulso a las industrias metálicas básicas, para infraestructura industrial y de transporte. Los encuestados notaron un incremento importante de la producción de las refinerías de Minatitlán y Salina Cruz, tras los trabajos para rehabilitarlas.
La demanda de madera, asociada con proyectos de construcción y renovación de hoteles, se elevó en la Riviera Maya y en Acapulco, luego del paso del huracán Otis.
La industria de autopartes apuntaló a los productores de polietileno, ya que hay un requerimiento estable en los clientes nacionales. Los empresarios dedicados a fabricación de tuberías de acero vieron repuntar las exportaciones a Estados Unidos debido al desplazamiento de componentes asiáticos por los conflictos geopolíticos entre estas naciones.
Los focos rojos
Para el primer trimestre del año, la región norte que comprende Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, fue la que mayor crecimiento tuvo en turismo con 2.9 por ciento.
Sin embargo, eso no logró atenuar la caída en el resto de los sectores, que para el caso de la actividad agropecuaria fue de 11.6%, la más pronunciada del país; sumando un retroceso de 7.6% en el sector de la construcción.
En general, el norte del país tuvo contracción de 0.5% en su actividad económica en comparación con el trimestre anterior.
La creciente demanda de energía eléctrica y la escasez de agua han frenado el desarrollo de parques industriales y viviendas; en el caso de Sonora y Nuevo León, a estos factores se suma una mayor percepción de inseguridad que afecta también la venta de vivienda privada.
En relación con la construcción pública, los empresarios reportaron un retraso en obras de la Línea 5 del Metro de Monterrey debido a un litigio con vecinos de la zona; así como el bajo desarrollo en infraestructura carretera en algunas regiones, factores limitantes para los profesionales del ramo.
En Ciudad de México, Estado de México, Guanajuato, Hidalgo, Morelos, Puebla, Querétaro y Tlaxcala, que componen la región centro, con una caída de 0.2%, sólo hubo dos sectores al alza: minería, de 2.5%, y turismo, de 0.7 por ciento.
El sector de la construcción bajó 7.4% mientras que el agropecuario cayó 7.8%; los directivos entrevistados mencionaron que la venta de viviendas en fase de preventa ha disminuido, frenando el avance de estos proyectos en la Ciudad de México.
Además, mencionaron factores de incertidumbre generados por la espera a conocer las políticas de vivienda de los gobiernos entrantes, y los resultados de las elecciones en Estados Unidos que podrían afectar la relocalización de la producción y la construcción de espacios industriales.
A pesar de estos desafíos, subrayaron el impulso de la lotificación de terrenos para naves industriales y viviendas en las áreas cercanas al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
Previsiones de crecimiento regional
Entre los factores externos que afectan a todas las regiones, los directivos destacan la expectativa de que la economía de Estados Unidos continúe creciendo, esto impulsaría las exportaciones de autopartes, automóviles y vehículos pesados, así como la demanda de servicios de transporte de carga y marítimos.
Además, la relocalización de empresas seguirá fomentando la construcción de naves y parques industriales, así como espacios comerciales y oficinas, lo que también aumentará la demanda de servicios profesionales, científicos y técnicos.
La apertura de nuevas rutas aéreas hacia América del Norte y Europa, junto con una posible apreciación del dólar, podría incentivar el turismo de placer, especialmente en destinos de playa, así como el turismo médico y de negocios. Este incremento en el flujo de turistas extranjeros elevaría la demanda de insumos necesarios para la remodelación de hoteles, restaurantes, viviendas y hospitales.
En cuanto a los factores internos, los empresarios destacan que la disminución de la inflación y las tasas de interés facilitarán un mayor acceso a créditos hipotecarios, empresariales y de consumo.
Se espera un crecimiento en la actividad comercial, respaldado por un aumento en los puntos de venta de tiendas de autoservicio y conveniencia, el comercio en línea, mejores condiciones de crédito y el turismo de placer.
En la construcción privada, se anticipa una expansión gracias a la ampliación y construcción de nuevas plantas industriales, espacios comerciales, oficinas y viviendas residenciales y de interés social. También se prevé el desarrollo continuo de proyectos de infraestructura vial, carretera y de transporte público.
También se prevé que los elementos mencionados contribuyan al crecimiento de la actividad regional en los próximos doce meses, fortaleciendo tanto las economías locales como la nacional, que creció 0.3% en este periodo trimestral analizado por Banxico.