* La legisladora refirió que el proyecto es de bienestar, pero ni la dependencia que lo ejecuta sabe bien cuáles son las metas
MISAEL AUTE
El programa «Sembrando Vida» que se ejecuta en Chiapas podría estar viciado y ser un foco de corrupción, tal y como han surgido denuncias al respecto en otras entidades federativas, empero «aquí no ha habido quien se atreva a hacerlo», declaró la diputada local, Rosa Netro Rodríguez.
En entrevista vía telefónica, la legisladora, quien preside la Comisión de Bosques y Selvas del Congreso del estado, señaló que los funcionarios que manejan dicho programa son muy herméticos. «El proyecto es de bienestar, pero ni la dependencia que lo ejecuta sabe bien cuáles son las metas», afirmó.
Lamentó que con la implementación de la austeridad repúblicana los recursos económicos sean ahora parte del problema por el que no se puedan acabar con muchos vicios. «El Fiscal Forestal no tiene ni la infraestructura ni el presupuesto para llegar a fondo de situaciones de esta índole», subrayó.
En un breve análisis de la problemática consideró que cualquier programa social que el gobierno en turno implemente requiere de un estudio minucioso de la realidad existente en cada región, es decir de su tipo de suelo, clima, mano de obra, materia prima, usos y costumbres de la zona, plan financiero, entre otros.
Se representabte popular se postuló por no importar programas y ser copia de otros. «Ls Secretaría del Bienestar que es la encargada de este programa debe saber que sectores se van a fortalecer, cuáles son los objetivos generales, los objetivos específicos, el seguimiento y qué metas tiene», sostuvo.
Netro Rodríguez destacó la existencia de instituciones que tienen como objetivo reforestar en el territorio nacional por ejemplo, la Comisión Nacional Forestal.(Conafor), sin embargo, recalcó que no se aprovecha la experiencia de estas instituciones. «Se quiere borrar de golpe y porrazo a quienes conocen esa actividad».
Cabe mencionar que semanas atras la Secretaría del Bienestar en su informe trimestral de marzo de 2019 contaba con aproximadamente 54 mil beneficiarios, los cuales ascendieron a 212 mil para junio y 225 mil en diciembre de ese mismo año. La dependencia asevera tener supervisión constante de los técnicos a quienes no les tolera actos de corrupción.