El Financiero
Los inversionistas en Petróleos Mexicanos (Pemex) están celebrando la aprobación de una reforma energética que otorgará al Gobierno de Claudia Sheinbaum más control sobre el sector y hará que los bonos de la empresa petrolera con problemas financieros sean más parecidos a la deuda soberana.
La iniciativa, aprobada durante la noche por el Senado, establece que Pemex y la Comisión Federal de Electricidad volverán a ser “empresas públicas”. El cambio fortalecerá el control del Gobierno de México sobre las compañías.
Los inversionistas apuestan a que con la medida, la administración de Claudia Sheinbaum seguirá ayudando Pemex a reducir su deuda de casi 100 mil millones de dólares.
“La deuda de Pemex ahora debería cotizar más cerca del soberano con la aprobación de la ley de reforma energética”, señaló Edwin Gutiérrez, responsable de deuda soberana de mercados emergentes de Abrdn en Londres. “Los bonos tienen margen para seguir subiendo porque los diferenciales se habían disparado mucho”.
¿Cuánto han subido los bonos de Pemex por la nueva reforma energética?
En el último mes, a medida que la nueva reforma energética ganó impulso, los diferenciales de los bonos de Pemex se estrecharon alrededor de 100 puntos básicos frente a la deuda soberana, hasta situarse en torno a los 370 puntos básicos, cerca de un mínimo de tres años.
El proyecto de ley ahora debe obtener la aprobación de al menos 17 congresos estatales, un requisito cumplido bastante rápido por otras iniciativas constitucionales como la reforma al Poder Judicial y la del pase de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Los inversionistas dicen que los bonos de Pemex pueden seguir subiendo mientras la presidenta Claudia Sheinbaum elabora un plan para rescatar a la petrolera o continúa apoyando a la empresa con fondos estatales.
El predecesor de Sheinbaum, el presidente Andrés Manuel López Obrador, inyectó 80 mil millones de dólares en capital y exenciones fiscales a Pemex en el transcurso de su mandato… lo que hizo poco para revertir el declive de la compañía.
Calificadoras consideran reevaluar calificación de Pemex por aprobación de reforma energética
En su mensaje en el Zócalo del pasado 1 de octubre, la presidenta Sheinbaum prometió continuar con la política de su predecesor y apoyar a Pemex y CFE durante su sexenio.
“El objetivo sigue siendo fortalecer a Pemex y a Comisión Federal de Electricidad como empresas públicas, estratégicas del Estado. Quedaron atrás los tiempos de las privatizaciones”, dijo en el día de su investidura como presidenta.
Fitch Ratings comentó que está evaluando la calificación crediticia de la petrolera tras la aprobación del proyecto de ley, lo que podría elevar la nota hasta cuatro niveles en territorio de grado de inversión. Actualmente, la agencia califica los bonos de Pemex en ‘B+’, es decir, en territorio ‘basura’, mientras que S&P Global asigna a Pemex una nota de ‘BBB’.
“El hecho de que Morena, el partido gobernante, tenga ‘supermayorías’ en ambas cámaras del Congreso significa que sería relativamente fácil garantizar la deuda de Pemex, y si lo hicieran, la empresa pasaría a tener grado de inversión”, explicó Aaron Gifford, analista de mercados emergentes soberanos de T. Rowe Price en Baltimore.
“El hecho de que haya incluso un camino para llegar allí significa que los diferenciales de Pemex sobre el soberano deberían ser mucho más ajustados”, subrayó.