El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha declarado este sábado que, «por primera vez en la historia moderna», su país «cuenta con las armas más avanzadas», un tipo de armamento «que no tiene nadie más».
Con motivo del Día del Armero, el mandatario ha mantenido un diálogo por videoconferencia con el diseñador de tecnología espacial y de cohetes Guérbert Yefrémov.
Durante la reunión, Putin reveló que Yefrémov está detrás del desarrollo del misil hipersónico ruso Avangard, una ojiva planeadora capaz de alcanzar una velocidad de desplazamiento de 27 Mach (más de 30.000 kilómetros por hora) y de atravesar cualquier escudo antimisiles.
El presidente recordó que la retirada de EE.UU. en 2002 del Tratado sobre Misiles Antibalísticos (ABM) «obligó a Rusia a comenzar a desarrollar armas hipersónicas«.
«Tuvimos que crear estas armas en respuesta al despliegue estadounidense de un sistema estratégico de defensa antimisiles, que en el futuro sería capaz de neutralizar y anular todo nuestro potencial nuclear», enfatizó Putin, agregando que, gracias a Yefrémov y sus colegas, esto no sucedió.
«En las circunstancias modernas, para nuestro país la realización de su idea es, sin duda, comparable a la de los proyectos nuclear y de misiles de la Unión Soviética», subrayó Putin, dirigiéndose al diseñador.
«Nadie en el mundo tiene estas armas»
El mandatario también señaló que Rusia tuvo que asumir «durante décadas» el papel de los rezagados en lo referente a armas nucleares, de la aviación estratégica de largo alcance y de la tecnología de misiles intercontinentales.
Según Putin, esto ponía al país en una situación muy difícil e incluso peligrosa. «De hecho, hubo momentos en los que nos amenazaron, pero no teníamos con que responder«, destacó el presidente, añadiendo que aquella situación violaba el equilibrio estratégico.
Ahora, «por primera vez en nuestra historia moderna», Rusia posee «los tipos de armas más modernos», que «superan en mucho» por fuerza, potencia, velocidad y precisión a «todo lo que ha existido y existe hoy», aseguró Putin, subrayando que, al menos por ahora, «nadie en el mundo tiene estas armas».