La Jornada
El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, exigió este viernes respeto a su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien cuestionó la decisión panameña de rechazar la candidatura del historiador Pedro Salmerón como embajador de México en Panamá por denuncias de acoso sexual.
«La decisión del presidente de México es decisión suya, nosotros decidimos si aceptamos o no a un embajador», dijo Cortizo, según un comunicado del gobierno panameño.
López Obrador «tiene el derecho de designar a quien guste, pero Panamá es soberano de decidir a quién le dice sí y a quien le dice no», indicó Cortizo.
«Nosotros somos respetuosos no solamente de México, si no de todos los países y nosotros exigimos respeto para Panamá. Eso es lo que exigimos tanto del presidente de México como de cualquier otro país», agregó el mandatario panameño.
Las declaraciones de Cortizo se producen después de que el pasado 1 de febrero López Obrador anunciara el cambio de la candidatura para embajador de México en Panamá tras la declinación de Salmerón, rechazado por el país centroamericano por antiguos señalamientos de acoso sexual.
El anuncio vino acompañado de críticas del mandatario mexicano contra la decisión del gobierno panameño.
A Salmerón «lo propusimos para embajador en Panamá y como si fuese la Santa Inquisición, la ministra o canciller de Panamá se inconformó porque estaban en desacuerdo en el ITAM», la universidad privada donde surgieron las acusaciones, dijo López Obrador en su habitual conferencia matinal.
«La canciller (Érika Mouynes) nos pedía que no enviáramos la solicitud de beneplácito», detalló el mandatario, para quien Salmerón es víctima de una campaña de descrédito con un «componente conservador».
López Obrador dijo que en lugar de Salmerón será nombrada para el puesto la senadora suplente Jesusa Rodríguez.
Salmerón dejó su puesto como profesor en el ITAM en 2019 al ser señalado por presunto acoso sexual en medio de la ola de denuncias del movimiento #MeToo.
Tras el anuncio de la propuesta para nombrarlo embajador en Panamá, diversos grupos feministas retomaron las denuncias con la etiqueta «Un acosador no debe ser embajador».
