MANUEL MONROY
Las vejaciones contra los derechos humanos de niñas y mujeres son una de las más extendidas y persistentes en la actualidad, señaló la diputada María Diego Reyes, quien advirtió que se debe dejar de normalizar esta problemática, «que no solo afecta a las mujeres víctimas, sino también marca la vida de sus familiares’
«La declaración de la eliminación de la violencia contra la mujer, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) califica esas acciones como todo acto artero que tenga como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer», recordó.
Advirtió que en el mismo sentido la Convención Contra la Tortura y otras formas Inhumanas de trato o castigo, consideran que las consecuencias de las agresiones son una forma de tortura para las mujeres, niños y niñas, pues debilita el tejido social que mantiene unidas a las familias.
Enfatizó que de acuerdo al reporte mensual de muertes violentas contra mujeres en Chiapas, elaborado por la Secretaría de Igualdad y Género, los delitos más cometidos contra las féminas son: feminicidio, homicidio doloso, lesiones dolosas, secuestro, trata de personas, extorsión, entre otros.
Subrayó que la iniciativa «Únete», lanzada en 2008 por la ONU, tiene como fin prevenir y eliminar la violencia contra las mujeres y niñas en todo el mundo e hizo un llamado al gobierno, sociedades civiles, organizaciones feministas para hacer frente a este tema.