La policía interrumpe la grabación de una película del conocido empresario del sector que no tenía los permisos necesarios ni cumplía unas mínimas medidas higiénicas
El País
Tras las más de 200 fiestas clandestinas del puente del 12 de octubre, llegan a Madrid las orgías pandémicas ilegales con ínfulas hollywoodienses. Medio centenar de personas se encontraban en un local de Madrid para grabar un vídeo pornográfico cuando fueron “pillados con las manos en la masa, literal”, cuentan fuentes policiales. Entre los tres responsables del local que hacía de tórrido plató está un viejo conocido del mundillo, Ignacio Allende, alias Torbe, considerado el rey del porno en España.
“¡¡Delito contra la salud pública!!”, encabezaba el folleto que servía de reclamo para los improvisados actores, convocados para el miércoles 14 de octubre a las siete y media de la tarde. El lugar, el local Puta Locura, situado en la quinta planta de un edificio de la calle San Romualdo, en el distrito de San Blas de la capital. Se pedían mínimo 50 personas y la grabación iba destinada a la una web porno. “Rodaje / Orgía / Bukkake”, añadía la publicidad, que llegó a manos de la Policía Nacional. Los agentes se toparon, en efecto, con “prácticas sexuales multitudinarias” para ser distribuidas posteriormente como película para adultos.
Una vez en el lugar, agentes de los Grupos de Atención al Ciudadano comprobaron que no tenían ni los permisos necesarios para tal actividad ni se cumplían las medidas higiénicas mínimas que impone en Madrid el actual estado de alarma por la pandemia. El inmueble quedó precintado una vez desalojados los participantes en el sarao y los policías abrieron expediente de sanción a los tres responsables del local.
Se trata de tres españoles de 51, 45 y 24 años sobre los que se han interpuesto tres denuncias con propuesta de sanción. El nacido en 1969 es el conocido Torbe, con un nutrido historial de problemas con la justicia. Fue detenido por abuso de menores y en 2016 estuvo siete meses en prisión preventiva.
La Policía Municipal ya había informado el martes de que solo durante el fin de semana y el festivo del 12 de octubre desmantelaron en la capital más de 200 fiestas y reuniones que superaban las seis personas, que es el límite de las actuales restricciones. Alguna se celebró incluso en un piso del centro de la capital con decenas de asistentes y hasta pago de la entrada con tarjeta de crédito. Los agentes cursaron además un total de 1.528 propuestas de sanción por consumo de alcohol en vía pública, los conocidos como botellones, e interpusieron 1.782 denuncias por no usar la mascarilla.