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Desde 2017, especialistas detectaron que la población vulnerable que reside en la frontera norte de México consumía una droga llamada “Chinawine”.
Después de un análisis, se encontró en 90 por ciento de las muestras que la droga contenía fentanilo.
Así lo reveló la doctora Clara Fleiz, coordinadora del Grupo de Trabajo sobre Opioides del Seminario de Estudios sobre la Globalidad de la Facultad de Medicina de la UNAM, al citar el estudio: “Cuqueando la Chiva: Contextos del consumo de heroína en la frontera norte de México”.
“Recolectamos 80 muestras de calles, de las jeringas, y los sometimos a estas pruebas de detección rápidas. Entonces lo que encontramos es que de estas 80 muestras el 90 por ciento contenía fentanilo. Esto fue una alerta para nosotros e informamos a las autoridades sanitarias”.
Durante la videoconferencia, el “Consumo de fentanilo en la frontera norte y estrategias de reducción de daños”, Clara Fleiz advirtió que en zonas de Tijuana y Ciudad Juárez existe una transición muy acelerada en el consumo de esta sustancia.
De acuerdo con su análisis, en esta región existe una mayor demanda por la introducción del fentanilo en años pasados, mediante la distribución de droga mezclada con otras sustancias como cocaína, heroína y cristal.
“Durante la pandemia vimos que se empezó a extender este consumo de la Chinawine. Pero, otro hallazgo fue que este polvo blanco tambien estaba adulterado con fentanilo”.
El estudio revela que la mayoría de la población encuestada desconocía el fentanilo y solo seis usuarios en centros de tratamiento dijeron que esta sustancia es conocida como China blanco, M30, heroína sintética y polvo blanco.
Además, advierte un aumento del 63 por ciento de las sobredosis en usuarios de estas sustancias, cuyo tratamiento para revertirlo es la naloxona.
“El uno por ciento tenía acceso a la naloxona, este medicamento que revierte una sobredosis, y casi el 70 había tenido una sobredosis. Lo que principalmente sigue utilizando la población es utilizar agua con sal, les inyectan agua con sal cuando están cayendo en una sobredosis. Pero ahora sabemos con las investigaciones de la doctora que el agua con sal solo retarda la muerte”.
Otras revelaciones de los estudios
Actualmente en México, la naloxona no es de fácil acceso para la población ya que es considerado un psicotrópico.
Sin embargo, se trabaja en una iniciativa de ley para desclasificar este medicamento que revierte rápidamente la acción de una sobredosis.
El estudio de la UNAM también encontró una estrecha interacción del fentanilo con el VIH lo que facilita su transmisión. Además, nueve de cada diez usuarios resultaron positivos a hepatitis tipo C.
Entre otros datos relevantes, el estudio explica que el consumo de droga en la frontera norte del país, principalmente en la zona norte y el canal de Tijuana, inicia a los 14 años.
En tanto, a los 21 años comienza el uso intravenoso de sustancias, acción que realizan hasta ocho veces al día, cuyas dosis de droga llegan a costar entre 30 y 50 pesos.
