La Jornada
Ciudad de México. Un retorno dorado tuvo la taekwondoísta María del Rosario Espinoza al ganar el Abierto de Sofía, Bulgaria, tras el retiro de la británica Rebecca McGowan.
Para llegar a la disputa del título de la categoría menos de 73 kilogramos, la única mujer de México ganadora de tres medallas olímpicas dejó en el camino a la alemana Yanna Schneider (5-4) y la serbia Nina Perisic (15-5), después de un año sin competir por la pandemia del coronavirus.
McGowan no se presentó al combate, por lo que María, segunda en la siembra, disfrutó las mieles del triunfo en un torneo en el que ya había subido al podio en ediciones anteriores, pero que ahora tiene un significado especial porque anhela llegar a sus cuartos Juegos Olímpicos en Tokio.
La sinaloense tendrá que esperar entre mayo y junio cuando dispute la plaza con su paisana Briseida Acosta, que dio el lugar para el país, como lo establece el reglamento del Comité Olímpico Mexicano.
Briseida, quien también reapareció en los tatamis internacionales en suelo búlgaro, quedó fuera en su primer combate ante la alemana Lorena Brandl por marcador de 26-4 en la división de más de 73 kilogramos.