El Economista
En la semana del 17 al 23 de agosto, el estímulo fiscal a la gasolina regular es de 78.33 centavos por litro, una ligera reducción respecto al apoyo de 78.69 centavos de la semana anterior.
El gobierno federal dejó prácticamente sin cambios el estímulo fiscal a la gasolina regular o Magna, esto mientras los precios del combustible siguen registrando máximos históricos en las estaciones de servicio del país.
En la semana del 17 al 23 de agosto, el estímulo fiscal a la gasolina regular es de 78.33 centavos por litro, una ligera reducción respecto al apoyo de 78.69 centavos de la semana anterior.
Con ello, los automovilistas deberán pagar una cuota de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de 5.39 pesos por litro, la misma cuota de impuestos que la semana anterior.
En el caso de la gasolina premium y el diésel, el gobierno nuevamente los dejó sin estímulos fiscales, por lo que los consumidores de estos combustibles tendrán que pagar la cuota completa de IEPS de 5.21 y 6.79 pesos por litro, respectivamente.
Además, este domingo 18 de agosto el litro de gasolina regular se vendía a un precio promedio de 24.11 pesos por litro, lo que sería otro máximo nunca antes visto, según datos de la plataforma PETROIntelligence, que monitorea los precios de los combustibles en las estaciones de servicio alrededor del país.
La gasolina premium lleva sin estímulos fiscales desde finales del 2023 y el diésel acumula cinco semanas consecutivas sin apoyo.
La decisión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) de dejar prácticamente sin cambios los apoyos respecto a la semana pasada se dio en una semana en la que los precios internacionales del crudo presentaron cierta volatilidad, pero finalizaron sin muchos cambios el viernes respecto a la semana anterior.
El gobierno otorga estímulos fiscales a la gasolina a partir del comportamiento que tienen los precios internacionales del crudo. Si el petróleo sube, otorga más estímulo y cobra menos IEPS y viceversa, cuando el petróleo baja, da menos apoyo fiscal y cobra más IEPS.
Esta política fiscal busca garantizar la estabilidad de los precios de la gasolina en las estaciones de servicio mexicanas y sobre todo evitar incrementos abruptos en los combustibles o el llamado “gasolinazo”.
En general, durante 2024 el gobierno federal ha otorgado menos estímulos en comparación con los dos años anteriores, lo que por un lado le ha ayudado a recaudar más IEPS a las gasolinas que nunca, pero al mismo tiempo ha provocado que los precios de los combustibles se mantengan elevados este año.
De acuerdo con datos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la gasolina regular cerró julio de 2024 con un precio promedio a nivel nacional de 23.99 pesos por litro, el mayor precio registrado en la historia.
Esto significa que la gasolina ha subido 8.55% en lo que va del 2024 o 1.89 pesos, mientras que en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador el incremento del litro es de 24.24% o 4.68 pesos.
Además, este domingo 18 de agosto el litro de gasolina regular se vendía a un precio promedio de 24.11 pesos por litro, lo que sería otro máximo nunca antes visto, según datos de la plataforma PETROIntelligence, que monitorea los precios de los combustibles en las estaciones de servicio alrededor del país.