Proceso
DALLAS (AP) — Documentos previamente confidenciales que están relacionados con el asesinato del presidente John F. Kennedy en 1963 fueron publicados el martes luego de que el presidente Donald Trump firmó una orden poco después de asumir el cargo.
Los documentos fueron publicados en el sitio web de los Archivos Nacionales y Administración de Documentos de Estados Unidos (NARA, por sus siglas en inglés). La gran mayoría de la colección de más de 6 millones de páginas de archivos, fotografías, películas, grabaciones de audio y artefactos relacionados con el asesinato ya habían sido dados a conocer anteriormente.
Trump dijo el lunes a los reporteros que su gobierno difundiría 80 mil documentos, aunque de momento se desconoce cuántos de ellos se encuentran entre las millones de páginas de registros que ya han quedado a disposición del público.
“Tenemos una enorme cantidad de documentos. Tienen mucho que leer”, dijo Trump durante una visita al Centro John F. Kennedy para las Artes Escénicas en Washington.
Los investigadores calculan que hay alrededor de 3 mil documentos que no han sido publicados, ya sea total o parcialmente. Además, el FBI informó el mes pasado que había descubierto alrededor de 2 mil 400 archivos nuevos relacionados con el asesinato.
Muchas de las personas que han estudiado el material que el gobierno ha publicado hasta ahora afirman que la población no debería anticipar alguna revelación impactante en los nuevos documentos, aunque aún persiste un intenso interés en los detalles relacionados con el asesinato y los eventos que lo rodearon.
Kennedy fue asesinado el 22 de noviembre de 1963 durante una visita a Dallas. Mientras la caravana en que viajaba se aproximaba al fin de la ruta de un desfile por el centro de la ciudad, se escucharon disparos desde el edificio del Depósito de Libros de la Escuela de Texas. La policía arrestó a Lee Harvey Oswald, de 24 años, quien se había posicionado como francotirador en el sexto piso. Dos días después, el propietario de un club nocturno, Jack Ruby, mató a disparos a Oswald durante su traslado a la cárcel.
Un año después del asesinato, la Comisión Warren, establecida por el presidente Lyndon B. Johnson para investigar el caso, llegó a la conclusión de que Oswald actuó solo y que no había evidencia de una conspiración. Pero eso no puso fin a una red de teorías alternativas que se ha extendido a lo largo de las décadas.
A principios de la década de 1990, el gobierno federal ordenó que todos los documentos relacionados con el asesinato fueran almacenados en una sola colección dentro de los Archivos Nacionales y Administración de Documentos, que fuera puesta a disposición a más tardar en 2017, salvo cualquier exención designada por el presidente.
Trump, quien asumió su primer mandato en 2017, había dicho que permitiría la liberación de todos los documentos restantes, pero terminó reteniendo algunos debido a lo que calificó como un posible perjuicio a la seguridad nacional. Y aunque se siguieron publicando archivos durante el gobierno del presidente Joe Biden, algunos seguían siendo confidenciales.