Gaceta UNAM
Este primer cuarto de siglo se ha caracterizado por cambios vertiginosos, de incertidumbre y la reconfiguración del orden internacional, la convergencia de múltiples crisis, la diversidad de conflictos armados, y el ascenso en amenazas no convencionales, todo lo cual genera escenarios que ponen en riesgo a la humanidad.
Así lo expuso Alejandro Chanona Burguete, director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), al poner en marcha el conversatorio “Por unas ciencias sociales del siglo XXI. A 25 años del Programa de Posgrado en Ciencias Políticas y Sociales”.
La sociedad internacional “enfrenta momentos críticos y contradictorios; ahí tenemos a Trump o a Milei. Todo indica que desde el fin de la Guerra Fría estamos ante la transición de un viejo orden internacional a uno nuevo. Sin embargo, podemos ver que el pasado orden no termina de desaparecer y el nuevo no deja de estar”, explicó.
En la Sala Lucio Mendieta y Núñez de la FCPyS, ante Judit Bokser Misses-Liwerant, profesora emérita, y Karla Valverde Viesca, coordinadora de Posgrado, ambas de dicha Facultad, Chanona Burguete comentó que en este nuevo ciclo del orden internacional –el cual surgió desde el siglo pasado con el fin de la guerra de 1945– “transitamos del auge del neoliberalismo económico al regreso del proteccionismo, así como el impulso de los procesos de integración económica y regional, y sus múltiples formas de reconfiguración, que también afrontan sus propias crisis”.
En esta trayectoria, agregó, destaca el ascenso de China en materia económica, tecnológica y militar, que despliega sus estrategias para hacerse presente.
El gigante asiático identificado por Estados Unidos como su principal competidor estratégico, apuntó, avanza de manera decidida, promoviendo alianzas, y ante ello cabe preguntarnos si estamos en la antesala de una nueva bipolaridad.
Otras formas de conflicto
El también doctor en Ciencia Política por la Universidad de Essex en Reino Unido destacó que el crecimiento de los radicalismos y los fundamentalismos ha sido un rasgo distintivo del siglo XX y lo que va del XXI.
“El ascenso del oportunismo, de nuevos liderazgos, así como las direcciones autoritarias de regímenes en los que el bienestar nunca se globalizó; por el contrario, persisten múltiples desafíos e inequidades. El aumento de las guerras alrededor del mundo, su convergencia con las crisis climáticas y alimentarias, ha generado un deterioro, una carencia de desarrollo humano”, describió.
Grupos terroristas y organizaciones criminales transnacionales amenazan día a día la paz, continuó. “Somos testigos de nuevas formas de conflicto, de renovadas carreras armamentistas y de la reactivación de las empresas bélicas. El espacio es considerado como un campo de dominio estratégico, y las nuevas tecnologías militares (vehículos no tripulados, armas autónomas letales y aplicaciones de IA) avanzan a una velocidad vertiginosa”.
La invasión de Rusia a Ucrania “evoca la Realpolitik (postura que adopta un país cuando protege sus intereses nacionales de forma pragmática), la cual influyó en la Segunda Guerra Mundial y en el sistema bipolar que dividió al mundo. Esto en un contexto internacional, en el que se recrean nuevas formas de competencia económica, militar, tecnológica e ideológica. Hoy estamos frente a un nuevo momento crítico de la guerra a partir de la posición y construcción del gobierno de Trump, que está cambiando su relación con Ucrania y Rusia”.
Todo eso, subrayó, hace necesario repensar las ciencias sociales y que esto se vea reflejado en los planes y programas de estudio.
Y anunció: “Por eso estamos en el camino de la reforma de los planes de estudio de la licenciatura. El Programa de Posgrado ha preparado, sigue y seguirá formando a personas de alto nivel, quienes intervienen en los debates contemporáneos, y en contribuir a la conformación de nuevos enfoques de políticas, de participación ciudadana, de opiniones públicas informadas”.
Además de evocar los 25 años del Posgrado, recordó que en este 2025 se conmemoran siete décadas de la Revista Mexicana de Ciencias Políticas, y 75 años de la propia Facultad.
