“El bienestar animal es parte de nuestra cultura”, dice Costco, cadena estadounidense. En la práctica, sin embargo, la ONG Mercy for Animals ha documentado el maltrato que reciben los pollos en sus granjas.
Ciudad de México, 7 de febrero (SinEmbargo).– Nicholas Kristof, uno de los columnistas estrella de The New York Times, dice hoy: “Probablemente, como muchos de ustedes, pienso en Costco como una empresa ilustrada que ejemplifica el capitalismo que funciona. Una clasificación la colocó como la empresa número uno en la cual trabajar en términos de salario y beneficios; un excelente ejemplo de un negocio que es rentable y humano”.
Luego agrega: “A menos de que seas un pollo”.
“Los pollos asados que se venden por solo 4.99 dólares (unos 100 pesos mexicanos) cada uno son un sello distintivo de Costco, deliciosos y baratos. Son tan populares que tienen su propia página de Facebook y la empresa vende casi 100 millones al año. Pero un grupo de derechos de los animales llamado Mercy for Animals envió recientemente a un investigador encubierto para trabajar en una granja en Nebraska que produce millones de estos pollos para Costco, y los clientes podrían perder el apetito si vieran dentro de un gallinero”, dice el periodista.
Costco también está en México y vende los mismos productos, importados de Estados Unidos. Un pollo acá cuesta 125.71 pesos. La investigación de la ONG puede ser encontrada aquí: https://costcoexposed.com/
“Está tenuemente iluminado, con caca de pollo por todas partes”, dijo el trabajador, quien también grabó un video en secreto allí. “Es como una nube caliente y húmeda de amoníaco y excrementos mezclados”. Nicholas Kristof agrega: “Usted puede estar pensando: ¿Qué? La gente está muriendo en una pandemia. Donald Trump se enfrenta a un juicio político en el Senado. ¿Y estamos hablando de cada y de pollo?”.
Sin embargo, agrega el columnista, debemos cuidar nuestras brújulas morales. “Y algún día, creo, las generaciones futuras mirarán hacia atrás a nuestro maltrato del ganado y las aves de corral con dolor y desconcierto. Se preguntarán cómo a principios del siglo XXI pudimos haber sido tan ajenos a las crueldades que entregaron pollos de 5 dólares en un asador de Costco”.
El influyente columnista del Times agrega: “Torturas a una sola gallina en tu patio trasero y te arriesgas a ser arrestado. ¿Abusar de decenas de millones de ellas? Eso es agroindustria. No es que los pollos de Costco sufran más que los de Walmart o Safeway. Todos son parte de un sistema agrícola industrial que, a expensas del bienestar animal, se ha vuelto extremadamente eficiente en la producción de proteínas baratas”.
Citando la investigación, Kristof dice que los científicos han creado lo que a veces se llama “pollos explosivos” que aumentan de peso a un ritmo monstruoso: unas seis veces más rápido que los pollos en 1925. “La revista Poultry Science calculó una vez que si los humanos crecían al mismo ritmo que estos pollos, un bebé de un mes pesaría 660 libras”.
“A las gallinas les crecen pechos enormes, porque esa es la carne que quieren los consumidores, por lo que las patas de las aves a veces se abren o colapsan. Algunos se caen de espaldas y luego no pueden levantarse. Otros pasan tanto tiempo boca abajo que a veces sufren erupciones sanguinolentas y furiosas llamadas quemaduras por amoníaco; estas son una versión de las úlceras de decúbito de aves de corral”, cuenta.
Más de 200 empresas han adoptado los estándares de Better Chicken Commitment para prohibir la peor crueldad en sus operaciones. Costco no ha podido hacer lo mismo, señala Mercy for Animals.
En el portal en que se da a conocer la investigación, Mercy for Animals comparte dichos de Costco que no se cumplen en la práctica.
“Costco está comprometido con el bienestar y la manipulación adecuada de todos los animales que se utilizan en la producción de productos vendidos en Costco”, cita la ONG. Luego plantea lo real: “Los pollos se crían para que crezcan tan rápido que no pueden soportar su peso”.
“Es una importante obligación moral y ética que tenemos con nuestros miembros, proveedores y, sobre todo, con los animales de los que dependemos para los productos vendidos en Costco”, dice Costco. La ONG lo contradice: “Cientos de miles de pájaros son acurrucados en cobertizos inmundos, obligados a vivir durante semanas en sus propios desechos”.
“El bienestar animal es parte de la cultura de Costco ante la responsabilidad; servimos como custodios de los animales”, dice la compañía. La ONG señala que varios de los pollos nacen con deformaciones, tienen lesiones y son incapaces de caminar.
“Innumerables aves padecen enfermedades graves y varias lesiones, como heridas abiertas y quemaduras por amoníaco”, denuncia Mercy for Animals.