Gaceta UNAM
El SARS-CoV-2, virus causante de la enfermedad Covid-19, además de afectar los pulmones puede generar daños renales y cardiacos. Y al tener receptores en las neuronas, en ocasiones produce secuelas neuropsiquiátricas, alertó Gilberto Medina Hernández, del Hospital General Enrique Cabrera de la Secretaría de Salud.
Invitado a dar una conferencia sobre el tema en la Sexta Feria del Libro de Ciencias de la Salud, que organiza de manera virtual la Facultad de Medicina, advirtió que durante este año y medio de pandemia se han realizado estudios sobre casos clínicos, donde los pacientes han presentado afectaciones neuropsiquiátricas desde leves hasta graves.
“Entre los efectos leves se encuentran la anosmia o pérdida del olfato; y la ageusia o pérdida del gusto, además de migrañas, aumento de posibilidades de un posible infarto cerebrovascular, dolor de cabeza y disgeusia, trastorno en el que hay un mal sabor persistente en la boca”, puntualizó.
De los graves, destacan el deterioro cognitivo leve, el delirium (estado de confusión mental que puede aparecer y desaparecer a lo largo del día), insomnio, ideación suicida, cambios de ánimo, errores de juicio y, en casos excepcionales, psicosis.
Para tener secuelas neurológicas, el especialista detalló entre los factores de riesgo el tabaquismo, la edad mayor de 50 años, susceptibilidades genética y neuronal previas, así como ser individuos con una enfermedad neuronal previa.
Factores de riesgo: tabaquismo y la edad mayor de 50 años.
Aseguró que un grupo de riesgo es el personal de salud, que padece estrés laboral por la pandemia y un síndrome llamado “de desgaste del trabajador”, el cual implica padecer fatiga, ansiedad, irritabilidad, alteraciones del sueño y preocupaciones excesivas.
Medina Hernández señaló que los neurotransmisores del cerebro pueden afectarse a las dos semanas del contagio, y es entonces que la persona puede comenzar a presentar síntomas.
Más atención
En sus conclusiones, el científico destacó que la pandemia de la Covid- 19 sigue en evolución y que las manifestaciones neurológicas son frecuentes.
Hizo hincapié en que las alteraciones inmunológicas, la lesión cerebral hipóxica (afección que requiere tratamiento inmediato para restablecer el suministro de oxígeno al cerebro), las opciones de tratamiento disponibles y el estrés psicosocial podrían conducir a una ola de secuelas neuropsiquiátricas.
Por lo anterior, Medina Hernández consideró que una mayor atención a ellas podría ayudar a la identificación temprana y a un mejor tratamiento para los pacientes.
Finalmente, recomendó incrementar los estudios médicos en pacientes que han tenido la Covid- 19, para lograr una mejor documentación de las secuelas a mediano y largo plazos referentes a los efectos neuropsiquiátricos.
