La Jornada
El Salvador. El Congreso de El Salvador aprobó ayer una ley para agilizar la construcción de nuevas prisiones, en momentos en que el gobierno mantiene una ofensiva contra las pandillas y ha detenido a 13 mil 573 de sus presuntos integrantes en menos de un mes.
La normativa fue aprobada con los votos de 64 diputados aliados del presidente Nayib Bukele, de los 84 con los que cuenta la Asamblea Legislativa. A fines de marzo, el parlamento aprobó un régimen de excepción que tiene a policías y militares a la caza de presuntos pandilleros.
A esas agrupaciones se les atribuye el asesinato de 87 personas entre el 25 y 27 de marzo, lo que motivó la ofensiva liderada por Bukele.
La denominada “Ley Especial para la Construcción de Centros Penitenciarios” establece el marco regulatorio para «la planificación, diseño, construcción y mantenimiento de los centros penitenciarios que sean necesarios, en razón del incremento de la población privada de libertad».
De acuerdo con la normativa, será el Ministerio de Obras Públicas la entidad encargada de la construcción de las nuevas prisiones y con la posibilidad de que pueda establecer “convenios” con empresas privadas para tal fin.
Las prisiones serán operadas por la Dirección General de Centros Penales. La ley aprobada no establece un número específico de prisiones a levantar, que se sumarán a la veintena de cárceles que ya existen.