El oro ha vuelto a romper el techo de su cotización convirtiéndose en uno de los activos tradicionales -excluyendo las criptomonedas, que llevan con nosotros tan solo unos pocos años- que más han subido desde que se desató la pandemia. Lo cierto es que ya llevaba una tendencia positiva desde septiembre de 2018, pero desde principios de marzo los futuros del oro han ganado unos buenos cientos de dólares en su cotización, convirtiéndose en uno de los activos más deseados por inversores de todo el mundo.
México es un gran productor y vendedor de oro a nivel mundial, por lo tanto, nuestras reservas han aumentado su valor casi un veinticinco por ciento en unos pocos meses, lo cual puede servirnos para obtener divisas fuertes de los países netamente importadores, para crear una reserva de valor y para aumentar el valor de las ETFs de oro.
No solo la compra física
Para aquellos que aún quieran meter algo de capital en el oro -ya sea para crear una reserva de valor o para especular con el precio esperando a que continúe subiendo para vender con beneficios- la compra física del metal no es la única opción disponible. Teniendo siempre en cuenta que cualquier inversión conlleva un riesgo de pérdida intrínseco, podemos decantarnos no solo por adquirir el oro -que debe ser custodiado- sino también por las ETFs.
¿Qué es una ETF? Una ETF es un fondo cotizado, los cuales podríamos definir como un fondo de inversión que se compra o vende como una acción, lo que implica que podemos negociar con las participaciones de una ETF en bolsa con toda la sencillez que una acción implica. En el caso de las ETFs de oro constan de un único activo, el oro, pero otras ETFs pueden contener por ejemplo acciones de varias compañías petrolíferas -si son ETFs de petróleo- replicando el comportamiento de las acciones de las mismas de una forma mucho más sencilla que si tuviéramos que hacerlo nosotros de forma “manual”, es decir, para obtener la misma exposición que nos ofrece una ETF de un mercado determinado deberíamos comprar acciones de las empresas del sector de forma proporcional a su peso en dicho mercado, y cuando quisiéramos vender deberíamos hacerlo así mismo de forma también proporcional ¿posible? sí, pero sin duda un proceso sumamente engorroso.
¿Cuáles son las ventajas de las ETFs? Pues que son altamente flexibles, mucho más que si fueran un fondo de inversión al uso, y presentan una gran liquidez en el mercado, es decir, podemos convertirlas fácilmente en moneda fíat debido a su demanda. Además al estar expuestos a varios activos de un único mercado el riesgo es menor, ya que si parte de la ETF presenta malos resultados estos pueden compensarse por el resto de activos que forman parte de ella -esto no es una verdad universal, ya que como vimos en abril de este mismo año un mercado puede hundirse completamente de forma simultánea, como ocurrió con el petróleo-.
Trading de ETFs con CFDs
Por supuesto también podemos utilizar las ETFs para especular con su cotización en una plataforma de trading online si preferimos no comprar los activos sino especular con sus precios. Además en estos momentos podemos encontrar gran cantidad de información respecto al oro, ya que día sí y día también los medios financieros tienen al oro como uno de sus protagonistas indiscutibles, ya que ni en la crisis del 2008 sus precios alcanzaron los valores que marca actualmente. Por supuesto en el trading de ETFs también se utiliza el apalancamiento propio del trading online, por lo que el capital aportado por el trader no será más que una parte del capital de cada operación abierta, que funcionará a modo de depósito y que se complementará -en general en su mayor parte-, con capital que presta la firma del bróker con que se opere mientras dura la operación, lo que implica que el efecto de los resultados serán mayores sobre el depósito del trader, que es el que soportará beneficios y pérdidas del total de la operación, o lo que es lo mismo, ganaremos o perderemos un volumen mayor de dinero. Por esto mismo lo más inteligente es operar solo con brókeres que protejan frente a saldos negativos a sus clientes minoristas… o arriesgarnos a terminar nuestra incursión en el trading con deudas.
Si el trading se nos presenta como una opción más atractiva que la de comprar acciones de una ETF debemos analizar alguna -o todas mejor- reseña de algún bróker online que podamos encontrar en la red, ya que las opiniones de los usuarios o de los analistas pueden ahorrarnos mucho trabajo de investigación siempre que finalmente comprobemos la veracidad de lo leído, ya que una buena o mala experiencia no solo tiene que ver con las funcionalidades de la plataforma, sino también con la habilidad y sangre fría del trader, ya que en este mercado son mayoría quienes terminan por perder más de lo que ganan.
Por último recordar al inversor y al trader que los mercados se encuentran confusos y volátiles y probablemente lo estarán por un tiempo más o menos prolongado, por lo que se aconseja mucha prudencia en caso de querer arriesgar capital, y saber que la volatilidad por sí sola es arriesgada en las inversiones, -esta ya se encuentra en contextos normales en muchos mercados y ahora con más razón- y el apalancamiento también multiplica el efecto de esta y por tanto el riesgo de grandes pérdidas que ella pueda ocasionar.
