Mario Bustamante Grajales, Secretario General de la Industria del Transporte en Chiapas (Alianza), aseguró que el sector atraviesa una crisis que de no atacarse, llevaría a revivir una etapa similar a la de los años 80’ cuando el servicio “se caía a pedazos; los taxis, por ejemplo, no hacían viajes largos, pues se descomponían”.
Sobre esta etapa, recordó que en la citada década, la actividad vivió una serie de dificultades muy fuertes, provocadas principalmente por la inflación que en ese entonces llegó a 150%. “El sector se vio colapsado por lo que es imperioso que por lo que sucede ahora la autoridad tome cartas en el asunto”, solicitó.
Reveló que el organismo está por terminar un análisis del impacto que ha tenido la recesión económica en el sector durante los últimos meses. “Por ello antes de que termine este mes enviaremos una propuesta a la Secretaría de Movilidad y Transporte para conjuntamente con ellos tomar decisiones”.
El líder rechazó hablar del porcentaje de daño que tiene la actividad en Chiapas. “Sería irresponsable hablar de algún índice, pero lo que es visible es que en todas las modalidades (carga, pasaje foráneo y pasaje urbano), no se ha invertido en la renovación de unidades, si acaso algunos taxis y eso porque se les obligó de cierta manera a cambiar autos debido a que recibirán una concesión”, dijo.
Bustamante Grajales lamentó que debido a lo antes expuesto, no se percibe vaya a ver un buen fin de año para los transportistas. “Así lo hemos experimentado en los últimos tres años, pero a este 2022 se deben sumar otros factores negativos como la inflación y los estragos de la pandemia por Covid-19”.
Y no sólo eso. El representante sindical también comentó que además de algunas rutas que desaparecieron por la cuarentena alargada, hay ahora un fenómeno con el que se batalla que es la ausencia de conductores. “Muchos tratando de buscar alternativas en su economía, salieron en busca de trabajo a otros estados”.