Para el Consejo Internacional de Empresarios (Coine), la corrupción ha representado históricamente el impedimento para que el país alcance un crecimiento económico y social óptimo, ya que las prácticas relacionadas a este fenómeno trasgreden no solo el marco normativo, sino también la forma en que se nos percibe en el exterior.
El presidente del organismo, Martín Rodríguez Sánchez, destacó los esfuerzos que se han realizado para reducir esta mala práctica existente en las diferentes esferas del país y subrayó que se deben realizar campañas más insistentes que sensibilicen tanto a empresarios como a la sociedad en general sobre las consecuencias que dicho delito provoca.
De igual manera, calificó como una pena que el indicador de corrupción sitúe a México entre los países con mayores índices de este delito, ya que en ello yace la imagen desacreditada que tienen inversionistas extranjeros sobre el país.
“Debemos entender que la corrupción no solo son sobornos o desvío de fondos como lo hemos visto en las noticias, también está en cada mala práctica o acción deshonesta en la que cualquier persona busca sacar un beneficio o ventaja personal, aun cuando esté consciente que ello implica una consecuencia para los intereses generalizados de la sociedad”, dijo.
Ejemplificó que este «cáncer» se está viendo implícito en la pandemia que se padece, ya que al no quererse seguir las reglas que han establecido las autoridades para reducir el número de contagios, muchas personas optan por llevar a cabo acciones que evaden dichas obligaciones, llámese pagar una “mordida” para hacer una fiesta o en el caso de comercios, operar más allá de los horarios establecidos.
“Necesitamos estar conscientes que cualquier acción, por mínima que nos parezca, pero que implique en mayor o menor medida un grado de corrupción, debe buscar erradicarse para construir la base con valores que la sociedad, economía e instituciones requieren”, subrayó el líder empresarial.
Finalmente, el presidente del Coine instó a las empresas a cumplir con sus obligaciones y responsabilidades en apego a las leyes, porque con ello suman a la erradicación de la corrupción, al tiempo que abonan a un transparente clima de negocios que otorgue la certidumbre necesaria para atraer inversiones, consolidar empresas, fomentar rentabilidad y generar nuevas fuentes de empleo.