Milenio
El Congreso de Estados Unidos presentó un proyecto de ley que facilita inversión y adhesión de países latinoamericanos al Tratado que se tiene con México y Canadá (T-MEC) para contrarrestar la influencia de China y disminuir la migración.
Congresistas aseguran que Estados Unidos no presta la suficiente atención a América Latina, crítica compartida por muchos líderes latinoamericanos que han terminado por hacer negocios con China, cada vez más influyente y un socio comercial ineludible.
Congreso de Estados Unidos vs China
El proyecto de ley intenta ponerle remedio mediante la inversión y creación de una cadena de suministro comercial que generaría empleo en toda la región para, de paso, abordar causas migratorias, uno de los principales problemas para el presidente demócrata Joe Biden de cara a las presidenciales de noviembre.
La congresista María Elvira Salazar dijo en un video subido a la red social X:
«Va a permitir a las compañías norteamericanas que en este momento están en China regresar a Estados Unidos y al resto del hemisferio».
Beneficiaría tanto a Centroamérica como a Sudamérica, añade Salazar, una de las impulsoras del texto bipartidista y bicameral, junto con Adriano Espaillat, Mike Gallagher y senadores Michael Bennet y Bill Cassidy.
El proyecto crearía un programa de préstamos de relocalización, es decir de nearshoring y reshoring de 60 mil millones de dólares para reubicar empleos de China en Estados Unidos. Además establece un programa de subvenciones para la fabricación de textiles y de dispositivos y equipos médicos en América Latina y el Caribe.
Empresas chinas en México desplazan a EU y Europa
La llegada y crecimiento de empresas chinas en México están desplazando a las marcas clásicas americanas y europeas, aseguró la representante de comercio de Estados Unidos, Katherine Tai:
“Un elemento importante de lo que vendrá para estos años será el factor de que cada día se suman nuevos jugadores a todos sectores de la economía. La llegada de empresas chinas a México muestra confianza de estas por un país que es el séptimo productor a nivel mundial, aquello está desplazando a las marcas clásicas americanas y europeas”.
Aseveró que México, Estados Unidos y Canadá necesitan reafirmar intereses en cadena de suministro para seguir el ritmo de cambios provocados por presencia de empresas chinas. Declaró:
«Un reto que tenemos ante la sobrecapacidad de China es ¿cómo vamos a hacer nosotros, los tres países, para recuperar nuestro interés en el éxito de los demás? Reafirmar nuestros intereses en esta cadena de suministro para seguir el ritmo de los cambios y las presiones que nos afectan a los tres al mismo tiempo».
Entre los aspectos que necesitan tomar acción gobiernos integrantes del tratado está el del cambio climático; en el marco del foro de opinión con expertos del sector económico para evaluar el estado del T-MEC y las relaciones económicas de América del Norte, Joshua P. Meltzer, miembro senior del programa de Economía y Desarrollo Global de la Brookings Institution, enfatizó que China es actor económico que se caracteriza por tener visiones de gobierno, progreso e innovación tecnológica distintas a las de Estados Unidos.
Esto, aunque puede tener fortalezas para las relaciones comerciales entre las naciones de América del Norte, el cual señaló que es uno de los segmentos económicos mundiales más importantes, se debe trabajar para mantenerlas a fin de incluso poder hacer frente a los conflictos internacionales.
“En estos últimos tres años hemos visto uno de los crecimientos económicos más importantes de la última década, incluso entre México, Estados Unidos y Canadá se genera más del 20 por ciento del PIB mundial”.