DW
Las autoridades de seguridad de El Salvador desplegaron el sábado (25.05.2024) a más de 3.000 elementos del Ejército y la Policía Nacional Civil en colonias populosas del centro del país, según informó el presidente en licencia, Nayib Bukele.
«Luego de varias denuncias ciudadanas, acabamos de instalar un cerco de seguridad en las colonias Tikal 1,2,3, Valle del Sol y La Chintuc, en Apopa», publicó Bukele en su cuenta de X. Añadió que se han desplegado más de 2.000 soldados y 1.000 policías, sin entrar en detalles.
«Ya capturamos a varios pandilleros de la pandilla 18 Revolucionarios», concluyó el mandatario.
Esta concentración de soldados y policías se da bajo el régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, tras una escalada de asesinatos atribuida a las pandillas, y a pocos días de que Bukele asuma un segundo mandato consecutivo, a pesar de que lo prohíbe la Constitución.
Bukele aseguró recientemente que la Fuerza Armada de El Salvador, que realiza tareas de seguridad en el país desde hace décadas, está por «lograr su victoria más grande».
«Nuestra Fuerza Armada cumple 200 años y está a punto de lograr su victoria más grande…», escribió Bukele, que no ahondó ni especificó más.
Bajo el régimen de excepción, las autoridades reportan más de 79,200 detenciones y las organizaciones humanitarias han recibido más de 6,000 denuncias de violaciones a derechos humanos, principalmente por detenciones arbitrarias y torturas, y reportan unas 240 muertes de detenidos bajo custodia estatal.
Organizaciones de derechos humanos, como Amnistía Internacional (AI), advierten que la violencia de las pandillas se ha visto sustituida por la estatal, ejercida por militares y policías en las comunidades empobrecidas e históricamente afectadas por el accionar de las maras.
El régimen de excepción es una de las medidas que goz