El plan consiste en modificar genéticamente a mosquitos macho para que estos posteriormente se apareen en la naturaleza con ejemplares femenino insertando en sus organismos un ‘gen asesino’. Este gen autolimitante hará que las crías que tenga luego la hembra mueran antes de llegar a la edad adulta, justo cuando empiezan a picar a los humanos.
El objetivo de ello es la lucha contra la malaria, enfermedad que se transmite a través de las picaduras de estos insectos. Únicamente las hembras de mosquitos se alimentan de sangre humana, por lo que los machos que se liberen en la natulareza no supondrán un peligro para las personas.
El proyecto está implementando por la empresa Oxitec, que ya ha desarrollado mosquitos genéticamente modificados para combatir el virus del Zika. Gracias a estsos, las poblaciones de Aedes aegypti (el mosquito que transmite esta enfermedad) se han reducido en algunas áreas en un 90 %.
Se espera que los primeros insectos con el gen autolimitante estará listos para ser sometidos a prueba a finales de 2020.
La Fundación Bill y Melinda Gates ha financiado ampliamente trabajos para tratar de erradicar la malaria, una enfermedad que mata a unas 440.000 personas cada año.
