El Economista
El Banco Mundial recortó sus expectativas de crecimiento de México para este año y el próximo, al incorporar el impacto que han tenido en las inversiones productivas, las tasas altas y la fortaleza del peso mexicano.
El equipo de economistas del organismo estima que el Producto Interno Bruto (PIB) de México en este año, registrará un crecimiento de 1.7%, estimación inferior a 2.3% que proyectaron en junio y que pone en evidencia un segundo ajuste consecutivo desde 2.6% previsto por ellos mismos en enero.
Según sus proyecciones, la economía mexicana registrará en el 2025 un cuarto año consecutivo en desaceleración que claramente contrasta con el pico del registro post pandemia, cuando alcanzó un avance de 6% en el PIB, en el 2021, al reabrirse las actividades económicas.
Puntualmente, el desempeño esperado por Banco Mundial para el primer año de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, de 1.7%, incorpora un recorte desde la expectativa que tenían hace tres meses, cuando esperaban un crecimiento de 2.1 por ciento.
En videoconferencia de prensa, el economista jefe para América Latina en el organismo, William Maloney, resaltó que México es el mejor orientado geográfica y comercialmente para beneficiarse del nearshoring en la región. Pero matizó que sería relevante desarrollar una maniobra que atraiga inversiones y derrame su beneficio entre las empresas locales.
Al presentar el Informe Semestral para América Latina y el Caribe, destacó que México ha ejecutado una estrategia de aumentar significativamente el salario mínimo desde niveles “muy bajos”, lo que sí ha tenido un impacto positivo en los indicadores sociales clave.
Sin embargo, advirtió que la experiencia regional sugiere que “una vez que el salario mínimo alcance niveles más altos, los aumentos adicionales impondrán cargas a las empresas”.
La cara “B” del aumento en el salario mínimo
Al interior del informe, precisaron que, a partir de la experiencia internacional se puede asumir que “continuar con aumentos adicionales en el salario mínimo pueden desalentar la creación de empleo, inducir el desempleo y la informalidad e incluso aumentar la pobreza”.
En el documento agregaron que “muchos beneficios sociales están indexados al salario mínimo, lo que genera presión sobre los presupuestos gubernamentales y complica futuros ajustes fiscales”.
“El mercado laboral no es infinitamente resiliente y los gobiernos deben proceder con cautela”.
Elecciones en EU no son riesgo
El economista del BM reflexionó que el cambio de gobierno en Estados Unidos no representa un riesgo para la economía mexicana en el contexto comercial, pues “los acuerdos no han sido un punto álgido en la retórica de campaña parte de los candidatos”.
Consideró que hay estabilidad en las reglas del juego para los inversionistas gracias al Acuerdo comercial que opera actualmente en América del Norte, un tratado que, por cierto, fue renegociado por el candidato Republicano Donald Trump, lo que dijo, le resta incertidumbre en la eventualidad de un nuevo triunfo.
Pero matizó que será pertinente “asegurarnos que el lado mexicano transmita la sensación de estabilidad en el respeto y cumplimiento de las reglas del juego para los inversionistas”.
El economista del BM refirió que las inversiones productivas requieren compromiso de respeto a la regulación acordada, al menos para un lapso de 20 a 30 años.
AL crecerá 1.9%
Las economías de América Latina y el Caribe registrarán un crecimiento conjunto de 1.9% este año que subirá a 2.6% para el 2025.
El desempeño esperado para este año incorpora un ajuste al alza de una décima desde 1.8% previsto por ellos mismos en junio y un recorte para el año próximo también de una décima desde 2.7% estimado hace tres meses.
En el informe, lanzado a dos semanas de que inicien las reuniones Anuales del organismo, en Washington, explicaron que estos ajustes resultan de un mejor desempeño “en unos pocos países” así como de la expectativa de que seguirán bajando las tasas de interés.
Maloney, explicó que menores tasas de interés podrían ser un incentivo para los inversionistas.
Anticipan para Brasil un crecimiento de 2.8% para este año, que supera en ocho décimas el pronóstico de junio cuando estimaron que crecería en 2% y sostuvieron la expectativa de un crecimiento de 2.2% en el PIB del 2025.
Maloney comentó que la oportunidad del nearshoring está abierta para todos los países de la región, aunque México es el que está mejor orientado geográfica y comercialmente para aprovecharla.
Sin embargo destacó los casos de Colombia, Costa Rica, Panamá y Perú, que con estrategias dirigidas pueden generar incentivos a la inversión multiplicadora de crecimiento.
En BM hicieron un acercamiento al nearshoring donde concluyeron que los países de América Latina y el Caribe han atraído la menor proporción de las inversiones productivas que están buscando relocalizarse desde el 2022, lo que podría estar explicado por rezagos de tiempo atrás, donde destaca la inseguridad creciente.