Ningún acto que lacere nuestro pleno desarrollo debe ser permitido ni tolerado desde ningún aspecto de la vida pública o privada de las personas, señaló la diputada Carolina Zuarth Ramos al denunciar actos de violencia política de género en su contra. Desde el anonimato de las redes sociales, -subrayó-, ha sufrido de una campaña de discriminación y odio hacia su persona.
La legisladora, que es vicepresidenta de la Comisión de Atención a la Mujer y la Niñez del Congreso del Estado, sostuvo que la violencia política -principalmente en contra de las mujeres- es una de las problemáticas que impiden el ejercicio total de los derechos políticos y electorales de todas.
Al respecto, informó la legisladora, en días pasados, he sido objeto de una campaña orquestada por un grupo de personas que se han dado a la tarea de atacar la información institucional de mis actividades legislativas en el H. Congreso del Estado de Chiapas. Lo han hecho desde el anonimato y la oscuridad que protege a la impunidad en la que siempre han operado.
Denunció que en días recientes destruyeron espectaculares de la Revista “Míralo”, ubicados en distintos puntos geográficos de la Frailesca, que contenían su imagen e información respecto a su quehacer legislativo.
“Al parecer los mueve el motivo de que las mujeres hemos llegado a los espacios públicos, que tomamos decisiones y que somos parte de la transformación de Chiapas, aunque eso signifique remover los privilegios, generar inconformidades y exponer inseguridades”.
Ante tan cuestionables actos, la legisladora señaló que su seguridad y la de su familia, podría verse vulnerada. Vivir en la zozobra nunca será una opción, porque el ejercicio político no puede verse como una diatriba y mucho menos como una expresión de odio que dañe nuestra tranquilidad.
Por ello hago este señalamiento con todo el valor, honestidad y pleno conocimiento de mis derechos y facultades, es un llamado a la justicia, a la razón y a la paz. Para detener de una sola vez, cualquier expresión que violente a mi persona o cualquier compañera en cualquier lugar de Chiapas.
Porque hay algo que todas y todos debemos tener claro: cuando existen agresiones de este tipo, estas distintas formas de violencia, es la sociedad entera la que está viviendo de cerca la injusticia y el abuso, y ya no es tiempo de tolerarlo, ni permitirlo.
Carolina Zuarth Ramos subrayó: “A mí me corresponde seguir con el compromiso de trabajar para que se respeten los derechos esenciales y se erradique cualquier expresión de la violencia. Pensando en las mujeres de la frailesca, en su voz, sus palabras y sus acciones que siempre me acompañan y me motivan”.
