La Jornada
Hermosillo, Sonora. Con el propósito de dignificar la economía de las familias en la sierra de Sonora, el gobernador morenista Alfonso Durazo Montaño, propuso prohibir la instalación y de tiendas de conveniencia para que las tiendas de barrio continúen generando ingresos locales en 40 municipios ubicados en el noreste de la Entidad.
El mandatario estatal expuso su propuesta y solicitó a la Secretaría de Economía y a la Secretaría de Gobierno su intervención para que dialoguen con las autoridades municipales, y en conjunto se trabaje una propuesta que prohibirá la instalación de las tiendas de conveniencia en los pueblos.
La medida llamada anti-oxxos también aplicará para otras tiendas de conveniencia como 7-Eleven y Extra, ya que, dijo, esos negocios modifican de manera muy importante la economía de esas poblaciones. Por lo que expuso, en la sierra muchas familias dependen de la venta de abarrotes, ante la falta de mercados y súper mercados en estas poblaciones.
“En el caso de Sonora puede haber veintitantos negocios de abarrotes, changarritos que desaparecen con la presencia de una tienda de conveniencia y queremos que esos changarritos continúen como sustento económico de las familias que históricamente han vivido de ellos, esa es la razón fundamental”, expuso Durazo Montaño.
La prohibición de estas tiendas de conveniencia aplicaría a los pueblos que se ubican en los 40 municipios de la zona serrana de Sonora, cabe destacar que luego del derrame de tóxicos que Grupo México provocó en agosto de 2014 sobre las aguas del Río Sonora, la principal fuente de ingresos que es la venta de productos regionales se vio afectada por la contaminación de metales en las aguas que consumía la población.