José Ramón Salazar Ballinas, presidente del organismo «Somos Chiapas» perteneciente a industria de la masa y la tortilla, adelantó que debido a que se han elevado los costos de producción de este alimento, el precio del kilo podría elevarse en febrero próximo hasta 25 pesos.
En breve entrevista, señaló que aunado a lo anterior, se debe considerar que las autoridades federales, como la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), no han querido actuar para regularizar la cadena producción-comercialización de este producto.
Dio a conocer que en Chiapas no existe un precio estandarizado para el alimento que forma parte de la dieta diaria de los mexicanos. «Hay zonas donde el kilo se puede adquirir en solo 11 pesos y en contraste, otros sitios en los cuales se expende hasta en 24 pesos. La disparidad es de más de doble y eso no se puede permitir», dijo.
Lamentó que aproximadamente cinco mil 400 tortillerias, de las seis mil existentes en la entidad, operan en la informalidad. «Estos negocios no pagan impuestos y mucho menos otorgan beneficios a sus trabajadores como Seguro Social o Infonavit».
Al ahondar sobre la crisis que esta industria vive, Salazar Ballinas detalló que ahora negocios de otros ramos, con el pretexto de allegarse más recursos, también venden tortillas y asi es como se ve que el producto se puede adquirir en papelerías, tiendas de abarrotes, rosticerías, entre otros.
Sobre este último punto culpó a la Dirección de Desarrollo Urbano del ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez de la proliferación de los expendios de tortillas, pues son los que otorgan los permisos para su funcionamiento. «Debería ser la autoridad que las regulara y tuviera un censo de cuántos negocios del ramo hay», anotó.
