Mesa de Redacción.– En su conferencia mañanera en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que los partidos que se oponen a la reforma, es porque “quieren seguir manteniendo a los plurinominales, entregando muchísimo dinero a los partidos, quieren que sigan los partidos nombrando, sobre todo los partidos al servicio de la oligarquía conservadora, a los consejeros (electorales), no quiere que los elija el pueblo”.
Por ello, comentó que enviará a los legisladores su plan “B” de cambios a leyes secundarias en materia electoral y que espera que este mismo año sean aprobados.
López Obrador agregó que en la nueva propuesta de modificaciones a leyes secundarias que enviará para su aprobación, no podrá incluir la reducción de los diputados ni de los senadores, pues esto sólo podría hacerse a través de una reforma constitucional. Tampoco se reducirán los recursos que se transfieren a los partidos políticos y estos seguirán nombrando a los consejeros del INE y a los magistrados del Tribunal Electoral.
En ese mismo sentido, el ejecutivo Federal destacó que la oposición “ya resolvió: “el INE no se toca”. Entonces, lo que vamos a hacer es proponer una reforma electoral, no una reforma constitucional, sino electoral, que no se contraponga, que no viole la Constitución y que permita reafirmar principios establecidos en la propia Constitución, por ejemplo, el que no se compran los votos”.
Posteriormente, el líder moral del partido Guinda declinó opinar sobre la gira «de reconciliación» que anunció el senador Ricardo Monreal -coordinador de la bancada de Morena-, dijo que antes de que termine su mandato tiene contemplado enviar al Congreso otras dos reformas legales, una relacionada con la austeridad republicana y otra con los evasores y defraudadores fiscales.
“Lo que sucedió en la Corte de que se dio protección a defraudadores, factureros, evasores fiscales, tiene que ir al Congreso. Antes de que me vaya también voy a enviar la iniciativa de austeridad republicana”, finalizó.