«Rubén Zuath y su esposa, la regidora Adriana Guillén Hernández, salieron a marchar supuestamente en defensa del INE, pero en realidad están en contra de perder los privilegios que han obtenido bajo el agandalle de los espacios plurinominales, aprovechando la permisividad de la ley».
La consideración pertenece al Consejero Político del Partido Revolucionario Institucional, Alfredo Araújo Esquinca, quien aseguró que la Reforma Electoral propuesta por Andrés Manuel López «pone al descubierto la incongruencia con la que se conducen algunos personajes que se dicen defensores de la democracia, cuando lo que ocurre es que sienten trastocados sus intereses».
Señaló no coincidir con la iniciativa de AMLO, pues dijo que lo mejor sería implementar candados para que las “pluris” no se entreguen como premios a las esposas o al compadre que patrocinó las campañas, «o peor aún, que los mismos dirigentes partidistas sean quienes las ocupen, porque quieren y pueden anotarse como los primeros en las listas».
El otrora funcionario lanzó la pregunta sobre si ¿No son estos excesos los que cansaron al electorado? y agregó que las pocas “pluris” del PRI en Chiapas quedaron en familia; «para eso llegó Zuarth a la dirigencia estatal, y es precisamente ese privilegio el que hoy los mueve, y no el espíritu de defender una democracia que no aplican ni en su propio partido».
Tras subrayar no creer en la postura protagonizada por Zuarth, consideró que si son las bases quienes elijan al presidente o presidenta del PRI en Chiapas, en lugar de hacer asambleas simuladas y, si hacen lo necesario para que jóvenes, mujeres y otros cuadros valiosos, distintos a sus cónyuges y amigos, ocupen las diputaciones de representación proporcional, entonces se les creerá que marchen.
