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La ONU advirtió el viernes (11.11.2022) que millones de desplazados y refugiados por conflictos y persecución en Ucrania, Afganistán y Oriente Medio sufrirán «dificultades extremas» con la llegada del invierno boreal.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) dijo que hay una necesidad urgente de más fondos para ayudar a las personas desplazadas en un momento en que se acerca un invierno que se proyecta que sea «el más difícil de los últimos años».
«Muchas familias desplazadas no van a tener más opción que elegir entre comida y calefacción en medio de las dificultades para calentar sus albergues, conseguir ropa de abrigo y cocinar comida caliente», dijo la portavoz Olga Sarrado a los periodistas en Ginebra.
La funcionaria destacó la situación de las millones de personas desplazadas de sus hogares por la invasión rusa a Ucrania.
Muchos están en albergues o en «viviendas dañadas o en edificios inadecuados para protegerlos del frío cortante, con cortes del suministro de energía, calefacción y agua y sin medios de subsistencia».
Sarrado también señaló la situación en Afganistán, advirtiendo que «muchos desplazados y familias afectadas por el conflicto van a quedar expuestas a la intemperie» en un país donde en el invierno las temperaturas bajan a -25ºC.
La agencia de la ONU destacó que se estima que 3,4 millones de sirios y de iraquíes desplazados por conflictos necesitan «asistencia crítica» para hacer frente al invierno.
Asimismo estimó que se necesitan 400 millones de dólares para que los desplazados en Ucrania, Afganistán y Oriente Medio cubran «sus necesidades más urgentes en los meses más fríos del año».
