Contra Línea
Existe evidencia sólida y libre de conflictos de interés que demuestra que la carcinogenicidad del glifosato –capacidad de esta sustancia de enfermar de cáncer a las personas– puede heredarse hasta en tres generaciones, señaló el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
En la antesala para legislar en materia de plaguicidas altamente peligrosos y bioinsumos –el próximo 14 de noviembre inicia la discusión sobre la reforma a la Ley General de Salud en comisiones del Senado de la República–, el Consejo reiteró que hay evidencia científica acumulada y contundente –sin conflicto de interés– que, además de demostrar la carcinogenicidad del glifosato, comprueba su actuación como disruptor endócrino y causante de otros daños a la salud humana, así como al ambiente.
En ese contexto, el Conacyt puso a disposición de la sociedad la página Efectos nocivos del herbicida glifosato, que compila artículos científicos actualizados sobre el herbicida glifosato (por ejemplo: “Concentración de glifosato en orina en mujeres embarazadas en relación con la duración de la gestación”; “Niveles cuantificables de glifosato en orina detectados en el 99 por ciento de la población francesa, con valores más altos en hombres, jóvenes y agricultores”; y “Un herbicida a base de glifosato en el suelo afecta diferencialmente la homeostasis hormonal y el rendimiento de las plantas de cultivos no objetivo”, publicados en 2022 por revistas científicas internacionales).
En un comunicado, la directora de Políticas y Normativa de la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem), Erica Hagman Aguilar, señaló que “sí hay sustitutos, las alternativas se están implementando”.
Afirmó que existen sustitutos puntuales, no tóxicos, formulados a base de distintos principios activos, en distintas fases de maduración tecnológica que pueden aplicarse para reemplazar al glifosato y a los plaguicidas altamente tóxicos.
También expuso que en el Plan Nacional de Desarrollo se plantea el reto de avanzar hacia la autosuficiencia alimentaria, poniendo el bienestar de la población por encima de cualquier interés económico y primando la salud de las personas.
El Conacyt reafirmó su compromiso con el cuidado de la salud humana y ambiental, el bienestar colectivo y con la soberanía alimentaria del país, con base en una alimentación sana, suficiente, de calidad, nutritiva, accesible y culturalmente adecuada. E infirmó que a 20 meses de la publicación del decreto presidencial que ordena sustituir de forma gradual el glifosato, la institución ha apoyado más de 60 proyectos de investigación e incidencia en 25 estados de la República que atienden cultivos con mayor uso de esta sustancia altamente peligrosa, que amenaza la salud de las personas y los ecosistemas.