Proceso
WASHINGTON (apro).– El gobierno del presidente estadunidense Joe Biden mantuvo a México en la lista de los países principales para el tránsito y producción de drogas ilícitas, pero se comprometió a fortalecer la cooperación con el gobierno mexicano para combatir al narcotráfico.
“La presencia de un país en la lista no constituye un reflejo de los esfuerzos que realiza su gobierno contra las drogas ni del nivel de cooperación con Estados Unidos”, aclaró Biden en el memorando que firmó y envió al Congreso federal estadunidense.
En paralelo, el mandatario informó al Capitolio de su decisión de designar a Afganistán, Birmania, Bolivia y Venezuela, como países que incumplieron sus compromisos y responsabilidades de combatir al trasiego internacional de narcóticos.
Bajo la designación de estos cuatro países, Biden notifica al Congreso que su gobierno castigará a estas naciones al negarles asistencia financiera para combatir al narcotráfico, amén que los gobiernos, el afgano, birmano, boliviano y venezolano, no se la solicitan.
“Por haber incumplido de manera demostrable su responsabilidad de realizar esfuerzos sustanciales durante los 12 meses precedentes para observar las obligaciones que asumieron en virtud de acuerdos internacionales contra el narcotráfico”, enfatiza Biden.
Las principales naciones de tránsito y producción de narcóticos identificadas por Biden son: Afganistán, Bahamas, Belice, Birmania, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, México, Nicaragua, Paquistán, Panamá, Perú, República Dominicana y Venezuela.
Biden anota, en el caso de México, que bajo el marco del Entendimiento Bicentenario, la cooperación de su gobierno con el del presidente Andrés Manuel López Obrador, se enfocará en seguridad, salud pública y comunidades seguras.
“Respaldamos y alentamos los esfuerzos de México por actuar contra los laboratorios de drogas clandestinos, químicos y de compañías involucradas en el desvío de productos químicos; establecer marcos firmes de control y rendición de cuentas con estos productos”, apunta el presidente de Estados Unidos en el memorando.
El mandatario también se compromete a incrementar la interceptación de precursores químicos y drogas sintéticas, detener a delincuentes clave en el crimen organizado en el trasiego de fentanilo y metanfetaminas y en el lavado de dinero.
Para combatir el tráfico internacional de drogas y atender la problemática de consumo de todo tipo de enervantes en su país, Biden solicitó al Capitolio un presupuesto de 23 mil 400 millones dólares para el año fiscal 2023 que inicia el próximo 1 de octubre.
“Estados Unidos tiene la determinación de trabajar con los países del Hemisferio Occidental en calidad de vecinos y socios, para enfrentar los desafíos que compartimos sobre producción, tráfico y consumo de drogas, y contrarrestar el impacto nocivo de la corrupción relacionada con los narcóticos”, concluyo Biden en el memorando.
