- Son intimidados por un grupo de corte militar que se encuentra en tránsito por los linderos de Chenalhó, advierte Patricia Mass Lazos
MANUEL MONROY
La diputada local Patricia Mass Lazos exigió atención para los poco más de dos mil indígenas desplazados del municipio de Aldama, por parte de un grupo de corte militar que se encuentra en tránsito por los linderos de Chenalhó, en las inmediaciones del río que divide a las dos demarcaciones citadas.
Comentó que diariamente hay noticias de la situación por la que atraviesan los afectados, gracias al reporte de un agente rural de la comunidad de Suchem, quien informa de constantes disparos en la zona con el consiguiente peligro para los habitantes entre los que hay niñas, niños, mujeres y ancianos.
La legisladora aseguró que ha recorrido el lugar y logró atestiguar la detonación constante de armas de fuego ante el temor de decenas de pobladores quienes se desplazan ya sea caminando o por medio de algún transporte. “Ignacio Pérez Giurón, edil de Aldama, ha solicitado a las autoridades puedan instalar una mesa de diálogo para hallar solución al conflicto, pero nadie lo escucha”, denunció.
Mass Lazos aseguró tener en su poder el expediente agrario en el cual se avala al municipio referido como el dueño de 60 hectáreas que los dos ayuntamientos mantienen en disputa y que ha derivado en que decenas de pobladores salieran huyendo de sus moradas con la conocida problemática que ello provoca.
Consideró que atender y garantizar la atención a los desplazados, representa un acto humanitario, de ejercicio de los derechos humanos, “pero también un acto en el que debe manifestarse la aplicación irrestricta del estado de derecho”, señaló tras recordar que recientemente se hizo un exhorto al Consejo Estatal de Atención Integral al Desplazamiento Interno, para que elabore el programa Estatal para la prevención y atención del desplazamiento interno en Chiapas.
Recordó que con esta acción se atenderá la demanda de familias chiapanecas residentes en otros municipios con los mismos conflictos, tales como Chalchihuitán, Ocosingo y Zinacantán. “Nuestro objetivo es que los lugareños regresen a sus lugares de origen a la tierra que los vio nacer”