* El cierre del edificio inició pasado el mediodía y culminó hasta las 15:45 hrs
MANUEL MONROY
Horas de desesperación y enojo sufrieron por lo menos 700 personas entre administrativos, Diputados, invitados especiales y representantes de medios de comuncación, tras que de este jueves un grupo de profesores de Telebachillerato tomara el Congreso del estado e impidiera su salida en demanda de que el gobierno les pagara salarios caídos.
La movilización de los quejosos inició poco después del mediodía frente a la entrada principal del edificio parlamentario y los miembros de seguridad del recinto nunca imaginaron que llegarían a tomarlo, por lo que no dieron el aviso de desalojo y la sesión de la LXVII se desarrolló sin sobresaltos.
No obstante, tras de que los legisladores desahogaran los cuatro asuntos de que constò el Orden del Día y de que se diera a conocer el llamado para la próxima sesión, fue que la mayoría se percató que no podría salir, pues el grupo de aproximadamente 70 profesores había bloqueado la entrada principal y las dos del estacionamiento.
Ante ello y la amenaza de los inconformes de mantener el cierre indefinido del inmueble, una Comisión del Congreso, encabezada por el Presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Marcelo Toledo, recibiò a algunos representantes de los educadores para iniciar un diálogo que pudiera dar una solución al conflicto.
Mientras estas negociaciones se desarrollaban, la mayoría de los afectados se les percibía enfadados y vagando de un lado a otro del recinto parlamentario, mientras otros entablaban conversaciones de un lado a otro de la reja, tratando de convencer a los maestros de dejarlos salir.
«Entendemos su demanda, pero nosotros no somos los culpables de que el gobierno no les pague. Hay formas de presionar a las autoridades para que les cumpla y así no afectar a terceros que no tenemos nada que ver en su movimiento», era la frase coincidente entre los que pedían libertad y los que no los dejaban salir.
Pasadas las 15:30 horas y tras de que aparentemente se manejó que llegaría la fuerza pública a desalojar a los profesores, éstos decidieron retirarse y la evacuación de quienes se mantenían en el interior comenzó sin mayores problemas.
Cabe hacer mención que en los últimos meses de la LXVI Legislatura un grupo de indígenas de Chamula tomaron igualmente el Congreso secuestrando aquella ocasión a aproximadamente 300 personas, a las cuales mantuvieron encerradas por cerca de ocho horas, por lo que fue necesaria la fuerza pública para desalojarlos y dejarán salir al personal y Diputados del edificio.
