MANUEL MONROY
Según datos del informe más reciente del Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE), Tuxtla Gutiérrez y Tapachula se ubican dentro de las ciudades de todo el país cuyos habitantes tienen la peor percepción sobre el desempeño de sus alcaldes, así como en el índice satisfacción por los servicios que les presta el Municipio.
El análisis 2018 de este grupo, integrado por un equipo multidisciplinario experto en observar, recabar, analizar y entender las actitudes y conductas de las personas, destaca que en cuanto al Índice de Evaluación de Alcaldes (IDEALC), fueron 76 ciudades evaluadas y que sólo en 39% de las mismas se conoce al edil en turno.
Para la medición, el GCE señala que pregunta al ciudadano cuál es el principal problema que percibe de su ciudad, y con base en esa respuesta, qué calificación le da a su alcalde en su resolución. Tuxtla Gutiérrez, con 13.13 y Tapachula, 16.09, ocupan el primero y tercer lugar de todo el país, respectivamente, en cuanto a la evaluación de sus ediles.
En cuanto al Índice de Satisfacción con los Servicios Municipales (ISACS), tales como recolección de basura, problemas de drenaje y fugas de agua, pavimentación y bacheo, mantenimiento de alumbrado público, mantenimiento de parques y jardines, control de ambulantaje, el estudio arroja también números negativos en ambas ciudades.
Así las cosas, la capital del estado y la Perla del Soconusco, se ubican en el 2º y 3º lugar de todo México, con 24.69 y 24.98, en ese orden, respecto a la conformidad de sus habitantes con los bienes y trabajos que son realizados por las autoridades municipales.
GCE detalla que para la elaboración del estudio recopilaron la opinión de 30 mil 400 ciudadanos, de 76 ciudades, 16 alcaldías y 400 entrevistas telefónicas por ciudad. “Nuestra intención es que los resultados sirven como guía comparativa para optimizar la toma de decisiones de acuerdo con las características culturales, sociales y políticas de localidades específicas”.
Refiere igualmente que el instrumento aplica, por un lado, indicadores estandarizados con validez internacional -satisfacción de vida, felicidad y cohesión social- lo cual permite realizar comparaciones con otros países y agrega que diseñaron indicadores propios para medir las características particulares de cada región, cultura y forma de gobierno.
