El accidente aéreo ocurrido el pasado 31 de julio en el Aeropuerto Internacional de Durango se debió probablemente a causas meteorológicas, informó el director de Análisis de Accidentes e Incidentes de Aviación de la Dirección General de Aeronaútica Civil (DGAC), José Armando Constantino Tercero.
“Se detectó la ocurrencia de una microrráfaga que vincula la información del grupo de registradores e induce a la línea de investigación que el factor causal de este accidente obedeció a causas meteorológicas”, apuntó.
Señaló que aunque no hay evidencia de fallas humanas en la conducción de la aeronave, se han iniciado los procesos administrativos para deslindar responsabilidades, abundó al presentar un avance de la investigación.
Acompañado por Luis Gerardo Fonseca Guzmán, director de Aeronáutica Civil de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y Arturo Roberto Duhart Irabien, director de Seguridad Corporativa de Aeroméxico, Constantino Tercero dijo que el informe final de la investigación se dará a conocer a finales de noviembre.
El vuelo 2431 de Aeroméxico, un Embraer-190, trasportaba 97 pasajeros y 4 tripulantes. No hubo fallecidos.
Once pasajeros estadounidenses que iban a bordo del avión presentaron demandas contra la aerolínea, informó Corboy & Demetrio, el despacho de abogados que lleva su caso.