MISAEL AUTE
“Tras de que se declaran las medidas preventivas para evitar la propagación del Covid-19, la zona turística y reserva natural del volcán Tacaná cerró, lo cual ha provocado que los prestadores de servicios de la zona se encuentren en crisis económica, al no tener como solventar sus gastos más elementales”.
El director de la zona referida -misma que pertenece a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp)-, Francisco Javier Jiménez González, reveló que guías de turistas, restauranteros, comerciantes y demás personas involucradas con las visitas al coloso, se han visto severamente afectadas.
“De común acuerdo se decidió cerrar las dos entradas que hay al lugar y ello originó que en la temporada vacacional de Semana Santa no arribaran cerca de cuatro mil turistas, cantidad promedio que llegaba para escalar, mientras que otros efectuaban cofraternidades para celebrar sus ascensos”, dijo.
El funcionario destacó que los ejidatarios del lugar están conscientes que era mejor cerrar temporalmente el lugar para evitar la expansión del coronavirus, empero, ante el alargamiento de la cuarentena, ahora viven con incertidumbre, pues no tienen otra forma de ingreso y sufren para cubrir sus necesidades.
Tras subrayar que El Tacaná además de ser un lugar propio para escalar -supera los cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar- es preferido por ambientalistas que gustan de admirar la flora y fauna, confió en que la pandemia pueda controlarse pronto, para que todo regrese a la normalidad.
“Ahora no queda otra más que pensar en una recuperación en los bolsillos de los lugareños para la próxima temporada de vacaciones, es decir, la decembrina, donde en promedio llegan a este sitio ocho mil visitantes”, comentó.