No habrá estímulos fiscales para los empresarios, al menos en el arranque de la administración encabezada por Andrés Manuel López Obrador, esto con el objetivo de operar un Gobierno de austeridad sin más deuda y con responsabilidad fiscal, informó este viernes Alfonso Romo, próximo jefe de Oficina de la Presidencia.
“Toda la parte de incentivos fiscales ahorita no va haber. Por lo pronto vamos a ahorrar, vamos a crear condiciones de confianza para que la inversión venga. Hoy no podemos hablar de incentivos porque tenemos que reducir el gasto corriente. Ya una vez que tengamos la casa en orden, entonces ya podemos hablar. Si hubiese un plan emergente, lo platicaríamos con el Consejo Coordinador Empresarial”, comentó ante los medios al salir del encuentro con CCE.
A la víspera de presentar la propuesta del presupuesto federal para 2019, señaló que el Proyecto de Nación se realizó con información disponible en ese momento, pero ahora ya que formalmente inicie la transición “se tendrá un análisis a detalle de dónde estamos y con base en eso el gabinete va a coordinar su nuevo presupuesto, lo va a aglutinar la Secretaría de Hacienda y ahí vamos a ver qué tanto margen de maniobra tenemos o qué tanto no”, dijo.
Advirtió que hay dos proyectos fundamentales que no se tocan, el rescate a los adultos mayores y el rescate a los jóvenes. De acuerdo con los recursos que encuentren disponibles y los acuerdos logrados con el sector privado y el sector social se verá cuánto se designa para estos proyectos, dijo.
“Será un gobierno de mucha austeridad, no más deuda y no más déficit”, reiteró el empresario regiomontano.
En esa misma línea, advirtió que para educación, ciencia y tecnología tampoco habrá gran partida presupuestal.
“No vamos a invertir el 1 por ciento del PIB, no vamos a comprometer a lo que no podamos cumplir. Vamos a ver dónde estamos, identificar los sectores más importantes para que los escasos recursos que tenemos se inviertan en donde son más necesarios para poder concentrar lo poco en lo sustancial”, señaló.
Al formalizarse el cambio de administración con la entrega de la acreditación a Andrés Manuel López Obrador como presidente electo, dijo que se hace más en forma el intercambio de información, pero desde semanas atrás ya empezaron con la revisión de los contratos otorgados por el gobierno de Enrique Peña Nieto y se hará en todos los sectores, energía eléctrica, petróleo e infraestructura.
“No se hacen bajo la premisa de la corrupción, sino cuando compras un negocio, revisas lo que estás comprando. Así nosotros con la responsabilidad que estamos adquiriendo, vamos a revisar todo para poder identificar áreas de oportunidad”, comentó.
EL FINANCIERO
