Milenio
Las redes sociales más adictivas en México son Facebook y Tiktok, pues del tiempo total que dedican los usuarios a usar internet, 75.4 y 50 por ciento de este lapso, respectivamente, lo dedican a estas plataformas, reportó el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
Facebook es la que más usan los mayores de 18 años en el país, con 60 por ciento del público.
Al segmentarlo por grupo de edad, el instituto destacó que en el caso de la aplicación propiedad de Meta, los usuarios de 18 a 26 años fueron las que mostraron una mayor dependencia con 81.5 por ciento.
“Cuando una persona es muy activa en esta red, es decir, sube contenido, su adicción aumenta al querer obtener visualizaciones, likes, comentarios, etc. Que de alguna forma lo hacen sentir aceptado, valorado e integrante de un grupo social. La adicción se genera por esta necesidad de aceptación”, comentó el IFT.
En el caso de TikTok, el segmento de edad que apuntó tener una mayor adicción a la plataforma fue de 18 a 26 años con 66 por ciento, seguido del grupo de 27 a 41 años que manifestó tener dependencia en 55.8 por ciento.
Sobre otras redes como WhatsApp, Youtube, Instagram y X (antes Twitter), también mostraron niveles de adicción considerables dentro de la encuesta con los segmentos de edad más jóvenes como los más apegados a las plataformas.
WhatsApp e Instagram, que también forman parte de Meta, mostraron niveles de adicción entre los usuarios de 42.5 y 24.9 por ciento, con el rango de edad de 18 a 26 años como el más inclinado a las redes con porcentajes superiores al 30 por ciento.
En los casos de la aplicación de videos Youtube y la red social X, los niveles se encuentran en 27.4 y 6.9 por ciento respectivamente, en el caso de X el segmento de edad que mostró mayor dependencia fue el de 27 a años.
Efectos por exceso de uso
El regulador apuntó que los usuarios de estas plataformas manifestaron tener efectos secundarios por usar mucho las redes sociales, como pérdida de la propia identidad y autoestima, es decir, sentir que la vida propia es menos valiosa que la vida de los demás.
Destacó que las personas que se exponen constantemente a las redes, van generando opiniones y expectativas poco realistas, difíciles de cumplir, lo que a su vez va produciendo sentimientos de baja autoestima, aislamiento, frustración y en algunos casos depresión.
“El estar en constante contacto con el estilo de vida que presentan otras personas, que generalmente está llena de lujos, viajes, visitas a ciudades en todo el mundo, fomentan que la persona se esté comparando todo el tiempo”, refirió el IFT.