El Universal
La principal plataforma de entregas a domicilio en América Latina, Rappi, se convirtió en una fuente de ingresos adicionales para casi medio millón de personas en México, donde, según el Coneval, más de 45 millones de trabajadores están atrapados en la pobreza.
Los repartidores independientes, conocidos como rappitenderos, tienen ingresos por hora de conexión efectiva entre dos y tres veces superiores al salario mínimo diario, indican registros de la empresa con el logo del gran bigote.
Esto equivale de 498 a 747 pesos diarios, es decir, cuentan con la posibilidad de ganar más que 377 mil médicos generales que estaban en activo entre abril y junio pasados, y cuyo sueldo promedio fue de 283 pesos diarios, revelan cifras de Data México.
También pueden obtener ingresos mayores que 429 mil abogados ocupados en el país, que percibieron 270 pesos, así como 11 mil economistas con un salario medio de 260 pesos que fueron reportados en la plataforma digital a cargo de la Secretaría de Economía.
“Queremos sacar a América Latina del hambre, sacar a millones de personas de la pobreza y poner a la región en el mapa. Rappi es un caso que muestra que los latinoamericanos podemos hacer cosas enormes si lo creemos”, aseguró Simón Borrero, director ejecutivo de la startup colombiana con presencia en nueve países de la zona.
“México es nuestro mercado más grande y rentable. Estamos creciendo mucho en las áreas de restaurantes, Turbo y Turbo Restaurantes [modelos que inventó Rappi con entregas ultra rápidas en 10 minutos o menos].
“Estas tres serán nuestros pilares de crecimiento en adelante”, agregó el también cofundador de la empresa valorada en 5 mil millones de dólares.
El tiempo que se conectan los repartidores mexicanos para generar ingresos adicionales es de 27 horas a la semana, ya que la actividad para la mayoría es complementaria a otras, expuso la compañía que celebra nueve años de operación.
Esperan claridad legal
Sobre la regulación de las plataformas digitales en México, Borrero se dijo optimista por la posibilidad de tener claridad en esos términos para que los rappitenderos preserven la flexibilidad laboral y continúen obteniendo importantes ingresos adicionales, “así como brindarles beneficios que hoy no podemos dar por falta de claridad en la ley”, señaló.
Para el vicepresidente de Asuntos Corporativos de Rappi, Martín Martorell, resulta fundamental preservar el modelo de trabajo bajo la premisa de la independencia, flexibilidad y autonomía.
“Cualquier cosa que quite el carácter de independencia será perjudicial para el tipo de trabajo que quieren los repartidores”, sostuvo en el marco de un recorrido que Rappi organizó por sus instalaciones en Colombia y en el que participó EL UNIVERSAL.
“Los repartidores buscan esquemas para aportar a la seguridad social, pero no quieren cargas tributarias excesivas que bajen su ingreso, pues están enfocados en la ganancia, al ser una actividad con un ingreso muy superior al salario mínimo, que incluso iguala o rebasa el que perciben personas con estudios académicos superiores”.
Rappi lidera un equipo de 400 mil personas con mochilas y chamarras de color naranja que entregan productos y servicios en más de 110 ciudades mexicanas, de los cuales 90 mil se conectaron como repartidores por primera vez en el último año, con la meta de obtener ingresos adicionales para ellos y sus familias.
A través de un estudio que desarrolló entre julio y agosto pasado sobre el universo de los repartidores en el país, Rappi encontró que la mayoría se encuentra en un rango de edad de 20 a 35 años. Entre las características de esta población es que hay empleados, retirados, jubilados y estudiantes, así como dueños de negocios y otros se dedican a tareas de cuidados.
Además de brindar acceso a microcréditos, descuentos y acceso a formación en diversas temáticas, la multinacional ofrece a los repartidores la cobertura de un seguro contra accidentes y creó el Centro de Apoyo a Repas “+ Cerca”, que defiende sus derechos humanos tramitando de manera expedita sus quejas y preocupaciones.
Tras comenzar como una plataforma de entrega de alimentos a domicilio, Rappi amplió rápidamente su oferta de servicios al incluir categorías como supermercados, farmacias, favores, tiendas, pets y licores.
En una sola aplicación, la empresa latinoamericana también ofrece servicios financieros a través de RappiCard, y boletos de avión, hospedaje y experiencias de viaje mediante RappiTravel.
Mientras planea su ingreso a la bolsa de valores de Nueva York en el próximo año, Rappi encabeza la lista de compañías de América Latina con mayor número de startups fundadas por exempleados, entre las que se encuentran las firmas mexicanas Clara, Plerk, Belvo y Nuvocargo.
