El Economista
La recaudación de impuestos fue el componente que impulsó el crecimiento de los ingresos públicos durante los primeros ocho meses del año, y contrarrestó la caída que observó en lo que se obtiene por concepto de petróleo, de acuerdo con la información divulgada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En el Informe de Finanzas Públicas y la Deuda Pública correspondiente a agosto, la dependencia detalló que el erario tuvo ingresos por 5 billones 49,383 millones de pesos, lo que resultó en un crecimiento anual de 3.6 por ciento.
Además del aumento, los ingresos captados resultaron 75,715 millones de pesos mayores a lo programado en el periodo, explicado principalmente por el buen dinamismo de lo que se obtiene por el pago de impuestos.
“En el acumulado de enero a agosto, los ingresos presupuestarios aumentaron 3.6% real anual, superando el promedio de crecimiento de los últimos 10 años de 2.3%”, indicó la dependencia a cargo de Rogelio Ramírez de la O.
Los datos mostraron que, entre enero y agosto, los impuestos dejaron una recaudación de 3 billones 340,250 millones de pesos, lo que representó un crecimiento de 6.3% en comparación con el mismo periodo del año pasado, con la recaudación de todos los impuestos avanzando.
La Secretaría de Hacienda indicó que este incremento se debió, principalmente, a las medidas de eficiencia recaudatoria que se han llevado a lo largo del año y que, durante el sexenio, han sido pilar para no implementar una reforma fiscal.
A detalle, el Impuesto sobre la Renta (ISR) –la mayor fuente de ingresos tributarios– dejó una recaudación de 1.83 billones de pesos, lo que representó un crecimiento anual de 0.3%. favorecida por el aumento anual observado en agosto de 5.3% real.
A lo largo del año, la recaudación de ISR había presentado un nivel por debajo del año; si bien ahora ha mostrado un ligero incremento anual, continúa 26,543 millones de pesos por debajo de lo programado.
En tanto, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) –relacionado con el consumo– dejó ingresos por 932,171 millones de pesos, 6.3% más anual y 52,208 millones de pesos por arriba de lo programado, contribuyendo con27.7% al total del crecimiento de los ingresos tributarios.
En el caso del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), el incremento fue de 41.1% en comparación anual, impulsados por el desempeño del componente de combustibles, el cual se incrementó en 81.9%, favorecido por menores estímulos fiscales otorgados a la gasolina; mientras que el componente distinto de combustibles creció 1.6% real anual.
En total, este impuesto que se aplica a diferentes rubros, como apuestas, cigarros, bebidas alcohólicas, diésel, entre otros, dejó 422,235 millones de pesos.
Por último, los impuestos recaudados por las importaciones dejaron 85,899 millones de pesos al erario, un incremento anual de de 34 por ciento.
Mayor precio, menor plataforma
La historia fue diferente para los ingresos que se obtienen por petróleo. Pese a un mayor precio para el energético en el periodo, una menor plataforma petrolera mermó lo obtenido.
Los datos de Hacienda mostraron que, de enero a agosto, los ingresos petroleros dejaron 684,808 millones de pesos a las arcas del gobierno, lo que resultó en una caída anual de 7.7 por ciento.
Con esto, los ingresos petroleros resultaron 61,677 millones de pesos por debajo de lo programado en el periodo.
“Los ingresos petroleros registraron una disminución real anual de 7.7% en el acumulado a agosto, derivado de una menor producción de crudo y un menor precio del gas natural, factores que se compensaron parcialmente con un mayor precio del petróleo. No obstante, al interior, destacó que los ingresos de Pemex crecieron 17.8% real, como resultado de las medidas adoptadas para mejorar su situación financiera”, expresó la Secretaría Hacienda.
De acuerdo con lo proyectado, se esperaba una plataforma de producción de 2 millones de barriles diarios; sin embargo, en los primeros ocho meses del año fue de 1.8 millones.
En tanto, el precio del barril fue de 72.9 dólares contra 58.4 dólares que se esperaban.
En el caso de los ingresos no tributarios, que se obtienen a través del IMSS, ISSSTE, Pemex y la CFE, sumaron 448,289 millones, 7.5% más respecto del mismo periodo del 2023.
