Prensa Latina
Al medir los costos de los trámites necesarios en el país en función de varios asuntos, la entidad determinó que para operar una pequeña empresa anualmente se destinan 923,5 horas.
Esto equivale –precisó el texto- a más de 38 días continuos, o 114 jornadas de trabajo de ocho horas, lo cual representa el 46 por ciento de los 248 días laborables del año 2023.
En el caso puntual del departamento capital –acotó- para iniciar una pequeña empresa y completar los trámites exigidos por 12 organismos del Estado se requiere un promedio de cuatro mil 870 horas, similar a 203 días.
La evaluación realizada ejemplificó que para tramitar una licencia de construcción hacen falta cuatro mil 870 horas, es decir, un promedio de 173 días.
Mientras tanto, solicitar una ambiental requiere mil 500 y una sanitaria 420 horas.
“En el caso de lo que es apertura de negocio, Guatemala está más o menos en cuatro mil 170 horas al año”, remarcó el CIEN.
Tal situación pone a este territorio centroamericano entre los cuatro peores de la muestra, por detrás de España, Venezuela y Panamá, expresó el investigador del centro, Sigfrido Lee.
A juicio del analista, una de las principales razones es un problema de mentalidad, “nos enfocamos en el proceso y no en el resultado”, apuntó en relación con el tema de atraer inversión extranjera.
Recomendó para reducir la burocracia, facilitar la competencia a nivel local y global, así como habilitar ventanillas únicas.
“Hasta que no entendamos que se tiene que ser un facilitador, agilizador y ocupar la mínima cantidad de trámites burocráticos, vamos a seguir teniendo estos problemas”, consideró Lee.
La burocracia –reflexionó- incrementa los costos, reduce la productividad de la economía en general, fomenta la discrecionalidad y, por ende, la falta de transparencia y la corrupción.
El binomio presidencial de esta nación de Bernardo Arévalo y Karin Herrera asumió el pasado 14 de enero último hasta 2028 con múltiples retos y la promesa de una nueva primavera.
Centran los ejes de su mandato en el combate a la corrupción, la delincuencia (el fin de las extorsiones desde las cárceles), el fortalecimiento del Ejecutivo y en la recuperación de la economía chapina.
