Comparado con las vacaciones de Semana Santa del año pasado, este año dicho período registró 50% menos de afluencia de turistas, principalmente en el Centro de Chiapas, aseguró Pablo César Albores, Presidente de la Alianza de Empresarios del Segmento Naturaleza.
Reveló que en la parte Norte de Chiapas, la cual cuenta con los ríos y selva, el porcentaje de visitas todavía menor, pues se llegó a 80% menos que los que arribaron en 2023. «Respecto a quienes gustan del turismo de observación de aves y de acampar, ahí la baja llegó a 85%», dijo.
En su opinión, la causa principal del descenso de paseantes en este segmento turístico, se debió a la inseguridad. «Lo anterior contrasta con lo sucedido después de la pandemia por Covid, donde había una necesidad de las personas por viajar y ello originó un aumento de visitantes».
Al respecto, comentó que los turistas de naturaleza conforman grupos pequeños, y tienen un período especifico para viajar, como por ejemplo de enero a abril, cuando no hay lluvias y los ríos mantienen sus colores naturales como el verde esmeralda, azul turquesa, entre otros.
Interrogado sobre si hay zonas que los tour-operadores han preferido dejar de visitar para no expone a sus clientes por la inseguridad, Albores aceptó que este año dejaron de llevar a observadores de aves en la reserva de la biosfera «El Triunfo», donde se puede ver regularmente al quetzal.
Calificó la situación como preocupante, pues la disminución impactó a quienes viven de esta actividad. «El segmento de naturaleza nadie voltea a verlo; en lo que se fijan es en quienes llegaron a conocer el Cañón del Sumidero, las cascadas de Agua Azul o algún Pueblo Mágico».
El también empresario vaticinó que si las autoridades no toman cartas en el asunto en el corto plazo respecto a la inseguridad, el turismo de naturaleza en Chiapas puede colapsar.