Rio Doce
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, aseguró el domingo pasado que su gobierno puede solucionar la crisis de violencia que va en aumento en Haití y que se necesitaría “una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, el consentimiento del país anfitrión y cubrir todos los gastos de la misión”.
Lo anterior lo citó el mandatario en respuesta a la publicación de un usuario en X, del sábado indicando que “Haití se ha derrumbado”.
Poco después Bukele reaccionó a otra publicación sobre el líder pandillero más notorio del país, Jimmy Cherizier, apodado “Barbecue”, diciendo “vimos imágenes similares en El Salvador hace unos años. Pandillas con los cráneos de sus víctimas”, detalló cnnespanol.cnn.com
El presidente de El Salvador, reconocido por su guerra contra las pandillas en su país, reiteró que, aunque “todos los expertos dijeron que” esos grupos “no podían ser derrotados, porque eran una parte intrínseca de nuestra sociedad”, se demostró que “estaban equivocados”.
El régimen de excepción promovido por Bukele desde hace poco menos de dos años ha sido criticado por diversos analistas y observadores internacionales como Amnistía Internacional o Human Rights Watch, que han denunciado violaciones sistemáticas a los derechos humanos.
Luego de su reelección, Bukele reconoció que la Policía de El Salvador pudo haber cometido errores al aplicar la política de seguridad de su gobierno, pero defendió las medidas de seguridad que ha implementado.
Las pandillas llevan varios días atacando comisarías, tribunales y prisiones, de las que se fugaron miles de presos, lo que ha causado preocupación de la comunidad internacional, publicó La Jornada
El Consejo de Seguridad de la ONU autorizó en octubre el envío de una misión internacional de seguridad a Haití dirigida por Kenia, pero su despliegue se ha visto retrasado por decisiones de la justicia keniana y por falta de financiación.
Este lunes se celebra en Kingston, Jamaica, una reunión de la Comunidad y Mercado Común del Caribe (Caricom) sobre Haití.
En 2023, El Salvador ya se había puesto a disposición de Haití para ayudar a reducir los índices de criminalidad.